Un capítulo de la historia del franquismo en Galicia se cerró ayer en Boimorto. Voluntarios de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH) y familiares de tres hombres paseados en la localidad coruñesa en 1936 les rindieron ayer homenaje y les dieron sepultura.

Los restos fueron exhumados en 2007 y en abril de este año las pruebas de ADN practicadas confirmaron las identidades, que corresponden con los vecinos reclamados por sus familiares, según informó la ARHM, el grupo originario del Bierzo leonés promotor de las primeras exhumaciones del franquismo. Los restos entregados ayer a sus familiares corresponden a Isidro Filloy López, Andrés Filloy y Caitán García Vázquez. La ARMH denuncia que las tres personas enterradas ayer fueron víctimas de una "limpieza política que asesinó a cientos de hombres y mujeres en una tierra en la que no hubo guerra en 1936, sino pura represión".

El número total de vecinos de Boimorto asesinados en agosto de 1936 asciende a 11, seis en el cementerio de Ortoño, en Ames, y cinco en dos fosas comunes en O Amenal, O Pino. Por ello, la Agrupación de Familiares de las Víctimas del 36 de Boimorto prevé retomar los trabajos para identificar a los fallecidos en cuanto sean conseguidos los permisos de accesos a una finca en la que, posiblemente, se encuentra una fosa común en la que podrían encontrarse los restos de Ramón Sánchez Rapela y Ramón Vázquez Garea.