El dirigente nacionalista Xosé Manuel Beiras considera que el actual "Gobierno de Galicia es una brigada de desmanteladores y destructores".

El histórico líder nacionalista encabeza un acuerdo electoral de su organización, Anova, y Esquerda Unida, que concurrirán a las elecciones del próximo 21 de octubre en la coalición denominada Alternativa Galega de Esquerda.

Para Beiras Torrado, el PPdeG es "un grupo político que llega a las instituciones para utilizarlas" y la Xunta, "un Gobierno que no merece tal nombre, sino una brigada de demolición -insistió-, que ocupó las instituciones conquistadas con tanto esfuerzo a lo largo de tantos decenios para utilizarlas en dirección contraria, para gobernar contra los ciudadanos.

A esta circunstancia sumó la "situación de emergencia", tanto en el ámbito europeo, como español, "con un régimen político nacido en la transición que está empodreciendo", con una Constitución "virtualmente abolida", y explicó que es este diagnóstico el que llevó a su organización a "ser generosos y, sobre todo, a tener más sentido de Estado que sentido de partido" y proponer "una amplia coalición electoral".

También estas circunstancias, según señaló a Efe, le llevaron a romper con su "determinación prácticamente firme de que no volvería a la política institucional".

Preguntado al respecto, apuntó que sus "opciones" en este momento "serían otras completamente distintas", también -dijo-, "porque mi experiencia en la política institucional es una experiencia por una parte muy grata en algunos aspectos, pero terriblemente disuasoria para volver".

Xosé Manuel Beiras afirmó que la propuesta de una coalición "amplia" sería "la réplica más contundente a las aduanadas del presidente actual de la Xunta", pero recordó que el BNG ni contestó formalmente y "es incapaz de comprender que aunque no queramos estar en la misma casa, eso no impide que podamos caminar juntos".

De Compromiso por Galicia, criticó que su dirección hubiese cerrado puertas. "Nosotros no queríamos que hubiese puertas cerradas y entonces empezamos las negociaciones con quien no cerraba puertas, no ponía límites, no excluía a nadie".

Constituido el acuerdo con Esquerda Unida, el dirigente nacionalista cree que "lo que se consiguió es muy importante, puede ser un enorme revulsivo, puede ser una bomba", opinó.

Este acuerdo "conjuga perfectamente la tradición del nacionalismo de izquierdas con la izquierda rupturista de ámbito español, pero que asume unas perspectivas y unos principios federales y de identidad nacional del pueblo gallego, aunque, evidentemente -reconoció-, no alcanza aquello que nosotros pretendíamos".

La coalición con EU, para Beiras, rompe "lo que podría ser una tradición" desde la transición, "pero la rompe -explicó- en el plano electoral, porque en otro plano no".

Así, puso el ejemplo del Gobierno en coalición del BNG con el PSdeG en la anterior legislatura gallega y se preguntó: "¿Qué pasa, que pactar con un partido españolista un Gobierno de coalición rompe menos, traspasa menos esa frontera que acordar una coalición para unas elecciones en una situación de emergencia?".

Tras referirse al antecedente de la participación del Partido Galeguista de Castelao en el Frente Popular, tras el bienio negro republicano, Xosé Manuel Beiras definió el acuerdo como de "unidad de acción" e insistió en que, igual que puede haber esa unidad de acción en el movimiento social, reivindicativo, en manifestaciones, en el plano sindical, de los movimientos cívicos o de defensa de los derechos, también puede haberla "para un reto electoral".

No obstante, negó que fuese "circunstancial", en el sentido de que sea algo "efímero", y que, una vez en el Parlamento, "cada uno haga lo que quiera". Insistió en su rechazo a esta posibilidad y apuntó que "un grupo parlamentario conjunto tiene que actuar como un conjunto".

Aunque ciñó la unidad de acción "a este escenario y a esta función en las instituciones autonómicas gallegas", el lider nacionalista se refirió a "lo que pueda ocurrir en la evolución de la situación en el Estado español".

En ese "escenario distinto", en su opinión, "el nacionalismo gallego, el nacionalismo de izquierdas, tiene que tener acuerdos con las fuerzas de otros ámbitos del Estado y fundamentalmente con las fuerzas de izquierda y no solo con las nacionalistas de Euskadi y Cataluña".

Xosé Manuel Beiras dijo que se trata de "fuerzas de ámbito estatal que asuman principios como los que se asumían en la pretransición o el tardofranquismo, cuando el horizonte era de quiebra democrática, un horizonte que seguramente es indispensable que ahora se abra plenamente para acabar con este régimen político".

Catedrático de Economía, rechaza radicalmente las actuales políticas de austeridad y comparó a sus defensores como unos hipotéticos físicos que negasen a Einstein o Max Planck y manejasen la energía nuclear con los criterios físicos anteriores. "Creo -agregó- que la comunidad científica, los físicos del planeta, dirían que son tan peligrosos que había que meterlos en un manicomio".

"Los economistas del establishment -abundó- están haciendo al respecto de la teoría keynesiana lo mismo que acabo de decir que harían esos locos en la Física".

Para Beiras Torrado, "todas las políticas de austeridad son una falacia" y se preguntó dónde está la austeridad "cuando el gran capital financiero hace enormes beneficios, más que antes de la crisis".

En su opinión, las políticas de austeridad son "recortar los gastos públicos de atención a las necesidades de los ciudadanos para pagar a los banqueros alemanes o a los grandes poderes financieros".

Comparó también esta situación con el mundo de la medicina y antiguas prácticas del sangrado de los enfermos, que, ya débiles, la mayoría moría. "Eso es lo que están haciendo con la economía actual estos animales, estos analfabetos, estos ignorantes absolutos, estos nazinecios".