"Estamos esperando acontecimientos y si el alcalde no dimite de inmediato tras su regreso a Ourense, el propio partido se lo exigirá formalmente", advertían ayer dirigentes socialistas de la provincia próximos al líder del PSOE gallego, Pachi Vázquez. Temen que aunque salga con cargos sus asesores le aconsejen que se aferre al cargo. El partido no quiere más daños colaterales a un mes de las elecciones. Desde el entorno de Vázquez, al que le ha estallado el escándalo de la operación Pokemon en plena preprecampaña, no le gustó la concentración en respaldo del regidor ayer en la ciudad de Ourense, y por eso algunos ediles del PSOE no asistieron. "Paco es un buen hombre pero muy mal aconsejado y seguro que aunque salga imputado con seis cargos, como ocurrió con el regidor de Boqueixón, determinadas personas de su entorno que dependen directamente de él le van a pedir que se aferre a la alcaldía", se lamentaban ayer dirigentes socialistas.

Oficialmente, el secretario xeral del PSdeG, Pachi Vázquez, guarda silencio en público sobre el futuro del alcalde, aunque fuentes socialistas sostienen que confía en que el regidor dimitirá por voluntad propia si es imputado. El objetivo de Vázquez es frenar cuanto antes el daño que el escándalo de la operación puede suponer el 21-0.

Pachi Vázquez sí admitió ayer que en su partido están "sufriendo con mayúsculas" tras la detención de Francisco Rodríguez, pero pidió "no distraer la atención" de lo importante: la campaña de las autonómicas. Ésta fue la única referencia que hizo su compañero de partido en un acto celebrado en A Coruña, ante más de medio millar de asistentes. El líder de los socialistas gallegos animó a sus compañeros a "sufrir por dentro" y a no despistarse "por fuera para no distraer la atención" del 21-O. En el PSOE ourensano, dividido entre los partidiarios del regidor y los de Pachi Vázquez, ya buscan relevo.

Por su parte, el candidato del BNG a la Presidencia de la Xunta, Francisco Jorquera, elevó ayer un poco más la presión sobre la implicación del regidor de Ourense, el socialista Francisco Rodríguez. A la espera de que se conozca su futuro, Jorquera se mostró tajante por la preocupación de que se abra una crisis de gobierno en Ourense en un momento crucial ante la proximidad de las elecciones autonómicas.

A preguntas de los periodistas, Jorquera aclaró que el BNG "siempre desligó la asunción de responsabilidades penales de la asunción de responsabilidades políticas" y en el momento oportuno, según sus propias palabras, lanzó que el alcalde de Ourense "tendrá que asumir las responsabilidades políticas que se deriven de este caso". El viernes, el Consello Local del BNG de Ourense se reunió de urgencia para tratar la situación de Rodríguez. Concluyeron que si el alcalde resulta finalmente imputado "debería abandonar el cargo". Creen que, de corroborarse alguno de los presuntos delitos que se investigan sería "lo oportuno" para evitar causar un prejuicio "a la institución". Si el tiempo pasa, es posible que se incremente la presión sobre Rodríguez para evitar daños preelectorales, invitándole a abandonar el cargo.

No sería la primera vez que se produce una crisis de gobierno en el concello ourensano. Ocurrió con el caso de los paneles -la adjudicación a dedo por 40 millones de euros de la explotación de los paneles informativos de la ciudad a la empresa Afiador Produccións-, que obligó a los socios de gobierno del BNG a dimitir en masa en el anterior mandato municipal para no perjudicar a la coalición.

Cuando el PP, por su parte, conoció la detención del alcalde de Boqueixón, el popular Adolfo Gacio, el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, se mostró rotundo. Prometió exigirle "responsabilidades" y expresó que en su partido "no tienen cabida las irregularidades". Finalmente la jueza imputó "por cohecho, prevaricación y blanqueo de capitales" y otros tres delitos al regidor de Boqueixón. Quedó en libertad bajo fianza de 10.000 euros. Tras la imputación, el PP de Galicia aún no se ha posicionado.

Cientos de ourensanos se concentraron ayer en la Plaza Mayor de la ciudad para ofrecer su apoyo al alcalde, uno de los trece detenidos en la operación Pokemon. El acto fue convocado el viernes por cargos del PSdeG local y difundido a través de Twitter. Entre aplausos y gritos de apoyo al regidor (que mientras tanto prestaba declaración en el juzgado número 1 de Lugo) los ourensanos permanecieron concentrados durante media hora delante del ayuntamiento, entre ellos, familiares y cargos socialistas próximos al regidor. No estuvieron ediles afines al candidato a la Xunta, Pachi Vázquez, distanciados de Rodríguez. En la concentración, tomó la palabra el exdelegado de Educación durante el bipartito, Gonzalo Iglesias Sueiro, para pedir que se "haga justicia" y "que prevalezca" la presunción de inocencia. / Redacción