El tercer equipo de Alberto Núñez Feijóo como presidente de la Xunta solo tendrá una cara nueva. Francisco Conde, hasta ahora asesor económico del primero, será a partir de hoy el nuevo conselleiro de Economía e Industria en sustitución de Javier Guerra, único que abandona el Ejecutivo. Los otros siete conselleiros mantienen sus funciones, aunque Alfonso Rueda compatibilizará las de titular de Presidencia, Administraciones Públicas y Xustiza con el cargo de vicepresidente, como se preveía. Esta decisión supone la elevación a categoría institucional de su condición de número dos del Ejecutivo, que ya ejercía de facto.

Un relevo y un aumento de competencias son las únicas modificaciones que ayer firmó Feijóo en el organigrama de la Xunta, que mantiene ocho consellerías, la cifra fijada en enero cuando Feijóo realizó un cambio en su equipo y pasó de 10 a 8 consellerías tras las salidas de nombres hacia el Gobierno central.

Además, Feijóo apuesta de nuevo por el perfil político bajo de sus conselleiros entre los que predominan los técnicos y un presidencialismo que ha marcado San Caetano desde 2009. Continuismo para encarar "el inicio de la recuperación" prometido en campaña.

El nombramiento de Conde, natural de Monforte y asesor en temas económicos de Feijóo desde el año 2009, permite al presidente de la Xunta dejar una consellería clave en la lucha contra la crisis en manos de una de las personas en las que más confía y permitir que la provincia de Lugo cuente al fin con un conselleiro, tras haber logrado los mejores resultados electorales el 21-O, aunque el nombramiento no salda una cuota territorial.

Profesor de Economía Aplicada en la Universidad de San Pablo CEU entre 1995 y 2009, Conde es un peso pesado en la sombra de la Xunta, clave en la elaboración de planes como los Impulsa de Lugo y Ourense y, sobre todo, en las gestiones con Pemex para lograr contratos para el naval y en la búsqueda de contratos en astilleros de Brasil, adonde viajó con Feijóo y Javier Guerra. A este, el titular de la Xunta le ha ofrecido un cargo de alta responsabilidad, según fuentes de la Xunta, aunque este todavía no ha decidido si lo aceptará.

Junto a Conde, se sentarán cada semana en el Consello de la Xunta Elena Muñoz (Facenda), Agustín Hernández (Medio Ambiente, Territorio e Infraestructuras), Elena Muñoz (Facenda), Jesús Vázquez (Educación e Ordenación Universitaria), Rocío Mosquera (Sanidade), Beatriz Mato (Traballo e Benestar), y Rosa Quintana (Medio Rural e Mar).

Salvo Mosquera, el resto de conselleiros son diputados y Feijóo, según fuentes populares, planea que alguno pueda mantenerse en O Hórreo y no tengan que dimitir como sucedió en 2009, cuando el PP tenía una mayoría absoluta por apenas un diputado. Ahora le sobran tres.

Uno de los que probablemente mantenga escaño es Rueda. Su nombramiento como vicepresidente sitúa de nuevo en el organigrama de San Caetano una figura que ya tuvieron los dos gobiernos de Gerardo Fernández Albor, el último de Manuel Fraga y el del bipartito. Rueda, por tanto, se une a una lista de vicepresidentes autonómicos en la que figuran, entre otros, Mariano Rajoy, José Manuel Romay Beccaría y el propio Feijóo. Ejercerá labores de coordinación del Gobierno y sustituirá a Feijóo en sus ausencias.

El continuismo marca, como se preveía, el nuevo Ejecutivo de un Feijóo que ahora deberá cumplir su promesa de que la economía gallega ofrezca brotes verdes en 2015 teniendo como herencia recibida la suya propia desde 2009 y con el Gobierno amigo de Mariano Rajoy en Madrid.

El nombramiento de Rueda como vicepresidente premia el trabajo de quien desde 2006 es mano derecha de Feijóo en el PP y desde 2009 en la Xunta. Fuentes populares interpretan en clave sucesoria este ascenso, si bien Feijóo ha negado siempre su intención de dar ese salto.

Ahora deberá decidir si continúa o no al frente de la Secretaría General del partido en el congreso del 20 de enero. Fuentes del PP ven probable que deje el cargo para descargar así su agenda. De ser así podría ser nombrado vicepresidente y mantener su poder.