El Ministerio de Justicia se había propuesto resolver el atasco de expedientes antes del 31 de diciembre de 2012. Más de un año después, los expedientes de nacionalidad continúan apilados a la espera de resolución, en algunos casos desde hace más de cinco años. Son muchas las trabas con las que se encuentran los inmigrantes a la espera del pasaporte español. No pueden acceder a una oposición, ni solicitar becas de estudios para sus hijos ni votar en España o viajar sin restricciones. Pero no solo eso. Además, corren el riesgo de que si se quedan sin trabajo pierden el permiso de residencia y por tanto se convierten en sin papeles.

Detrás de este atasco de expedientes está el aumento del flujo migratorio en España desde el año 1995, y en especial la entrada masiva de inmigrante en 2007, que disparó las peticiones de nacionalidad. Para tratar de solucionar el colapso en la tramitación de solicitudes de pasaporte español, el Ministerio de Justicia firmó un convenio con el Colegio de Registradores de la Propiedad, Mecantiles y de Bienes Inmuebles. Más de mil registradores se incorporaron a las oficinas para agilizar el papeleo.

Desde el año 2000 casi 800.000 inmigrantes afincados en España lograron la nacionalidad española. El año 2010 fue el ejercicio en el que se concedieron más nacionalidades por residencia, con más de 113.000. Le sigue el año 2011, con más de 119.000 extranjeros con pasaporte español.