Dos funcionarios del Concello de Lugo declararon ante la juez que instruye la operación Pokemon, Pilar de Lara, que tanto el alcalde, Xosé López Orozco, como los concejales enchufaron a diversas personas en empresas concesionarias de servicios municipales. Según testificó el jefe de negociado de la corporación local, Manuel Ángel Brea,el ayuntamiento funcionaba como "una agencia de colocación". Otro de los técnicos municipales que compareció ante la magistrada, Fernando Nemesio Tirimaos, explicó que hasta en tres ocasiones lo llamaron de Alcaldía para que le trasladara a Urbaser, empresa dedicada a la limpieza viaria, los nombres de tres personas para contratarlas.

Según se desprende de sus testimonios, el Concello de Lugo utilizaba la externalización de servicios para enchufar a personas afines. En concreto, hasta dos trabajadores municipales confirman ante la juez Pilar de Lara la contratación de pedáneos de varias localidades o de sus familiares no solo en empresas adjudicatarias de servicios sino incluso en el propio ayuntamiento.

Así, por ejemplo, el jefe de negociado del Concello de Lugo confirma que hay un pedáneo trabajando para Urbaser. Manuel Brea cita también al de San Salvador de Muxa, que trabaja en el propio ayuntamiento tras aprobar unas oposiciones. El jefe de negociado cuestiona incluso ante Pilar de Lara la legalidad de algunos procesos de selección. En concreto, explica que él estuvo en un tribunal de oposiciones "hace siete años" y renunció porque sospechaba que las preguntas "se redactaban en el despacho del entonces concejal de Economía, Francisco Fernández Liñares". Según el jefe de negociado, el Concello privatiza determinados servicios "para que a través de esas empresas puedan contratar a personal afín y que controlen el ayuntamiento".

"¿Cree usted que el Ayuntamiento de Lugo se estaría comportando como una agencia de colocación?", le pregunta Pilar de Lara. "Sí. Más antes que ahora", responde. Su testimonio se ve reforzado por las declaraciones de Fernando Nemesio Tirimaos, funcionario del Concello, que ahora ocupa el área de Deportes. "De Alcaldía me llamaba una persona en nombre del alcalde y me decían: oye, mira Timi, tomas los nombres y el teléfono de esta persona, habla con Urbaser para ver si lo pueden entrevistar", declaró ante la magistrada. Según le explicó, esto ocurrió hasta en "tres ocasiones". En una conversación recogida en el sumario, el alcalde ofrece a un expolicía "trabajo por seis meses". El BNG pidió ayer su dimisión, pero el teniente de alcalde, Luis Álvarez, defendió al regidor y aclaró que hubo dos entrevistas y en la segunda Orozco "echó del despacho a esa persona". "Una cosa es ser receptivo a las demandas y otra permeable a actos ilegales", añadió.