Los temporales de 2009 dejaron una cifra récord en daños: un total de 55 millones. No fue el huracán Hortensia, que barrió el noroeste peninsular en 1984, ni las graves inundaciones que cubrieron de lodo y cenizas gran parte de Galicia tras la ola de incendios de 2006. El mayor desastre natural de la historia de la comunidad fue el ciclón Klaus, una tormenta tropical que sorprendió incluso a los meteorólogos por la intensidad que adquirió al tocar tierra en Galicia la noche del 23 de enero de 2009.

Un estudio elaborado por el Instituto Geológico y Minero de España en colaboración con el Consorcio de Compensación de Seguro revela que en el periodo 2004-2033 las inundaciones provocarán en Galicia daños por un valor de 650 millones. La provincia más castigada sería A Coruña, donde las riadas elevarían los daños hasta los 271,2 millones. En Pontevedra, las pérdidas superaría los 142 millones, mientras que en Ourense rondarían los 117 millones y en Lugo se llegaría a los 119,2 millones. Este informe coloca a la Comunidad Valenciana a la cabeza de las autonomías más afectadas por las inundaciones en los próximos años, con una estimación en daños superior a los 6.490 millones.