Más de 66.000 gallegos han abandonado la comunidad para irse a trabajar a otros países desde que comenzó la crisis. Es como si casi la cuarta parte de la población de la ciudad de A Coruña desapareciese de un plumazo. Desde 2008, el incremento ha sido del 38%.

La radiografía de la actual diáspora al extranjero presenta unas características diferentes de la que se produjo en Galicia en la primera mitad de siglo pasado. En aquella época fueron jóvenes, sobre todo, los que se vieron obligados a hacer las maletas. Ahora, los menores de 30 años también optan por buscarse su futuro en el extranjero, aunque los de más edad también lo hacen.

De las 66.678 personas que residían en Galicia y salieron de la comunidad rumbo a otros países en los últimos seis años, el 29% tenía más de 45 años. Fueron 19.379. De todas formas, los jóvenes siguen liderando la huida hacia otros destinos internacionales. El 40% (26.908) tenía entre 16 y 34 años. Pese a todo, las franjas de edad en las que más ha crecido la emigración desde 2008 son las de entre 45 y 54 años (64%); entre 35 y 44 (52%) y los mayores de 65 (44%).

Haz click para ampliar el gráfico

"Desde hace dos años la emigración ha crecido bastante por la crisis que hay en España", reconoce Francisco Ruiz, expresidente del Consejo General de la Ciudadanía Española en el Exterior y en la actualidad consejero por Suiza. Ruiz diferencia entre dos tipos de emigrantes: los que hacía años que habían vuelto a España tras emigrar desde Galicia y de nuevo retornan por la mala situación económica y los jóvenes, algunos de ellos nacidos en los países de acogida, que deciden buscarse su futuro en el extranjero.

"Hay mucha gente que ya había estado emigrada y que tras unos años en España vuelve a los países en los que ya estuvieron porque conocen a las empresas, conocen a otros compatriotas que les pueden ayudar a encontrar trabajo y conocen cómo funciona todo porque han vivido mucho tiempo en esos lugares", relata Francisco Ruiz. La mayoría de estos emigrantes supera los 44 años. El número de gallegos a partir de esta edad que se ha marchado de la comunidad casi se ha duplicado desde el arranque de la crisis.

El otro perfil de la emigración es el de gente joven que no ve futuro en su tierra. En el caso de los que viajan a Suiza, por ejemplo, muchos nacieron en el país helvético. "Venían creyendo que iban a su país de nacimiento e iban a tener algún derecho, pero Suiza no les reconoce ninguno", sentencia Ruiz.

Por segunda vez desde el inicio de la crisis, la salida de gallegos a destinos internacionales cayó en 2014 con respecto a 2013. En 2009, el incremento, con respecto al año anterior, fue del 2,6%; en 2010, del 2,2%; en 2011, del 1,6%; en 2012, del 6% y en 2013 se disparó hasta el 19%. Por primera vez desde comienzos de siglo, el número de personas que abandonaron la comunidad para irse fuera de España superó los 11.000 en un año. De los 9.000 que se marcharon en los años 2009, 2010, 2011 y 2012 se pasó a los 11.739 de 2013. En 2014, el número fueron 10.292, un 12,3% menos.

Por provincias, A Coruña y Pontevedra concentran siete de cada diez emigrantes que hacen las maletas para irse a un país (42% y 32%, respectivamente), mientras que los ourensanos representan el 16% y los lucenses, el 9%. Según Francisco Ruiz, la inmensa mayoría de los emigrantes viajan sin tener un empleo. "No conozco a nadie que venga con un trabajo asegurado. Antes sí era así, ya venían con el contrato y hasta las empresas iba a buscar a la gente a sus países, pero eso ahora no ocurre", concluye.