La lluvia dio una tregua estas semanas después de que los montes gallegos viviesen a principios de agosto una de las peores olas de incendios, similar a la de 2006. Solo en el segundo fin de semana de agosto se produjeron 134 fuegos, de los cuales el 40% empezaron de madrugada. El Plan de Prevención de Defensa contra los Incendios Forestales de Galicia (Pladiga) de la Consellería de Medio Rural recoge que este año se mantienen los 160 millones -la misma cuantía que el año pasado- para la prevención y la extinción. Las autonomías -salvo Cataluña y Extremadura de las que no se recogen cifras- gastaron en 2014 unos 700 millones en la lucha contra el fuego, de los que el 22% se corresponden con la inversión por el Gobierno gallego. Galicia es la segunda región que más dinero destina a los incendios y la cuarta con más superficie forestal con dos millones de hectáreas, por detrás de Aragón con 2,2 millones y sobre todo Andalucía y Castilla y León con 4,4 y 4,8 millones de hectáreas de suelo forestal respectivamente. La comunidad andaluza además de ser la segunda que más superficie de monte tiene es la que más invierte en prevenir y extinguir fuegos con un total de 164 millones, cuatro más que Galicia.

Si se tiene en cuenta el suelo forestal de cada autonomía, Castilla-La Mancha sería la que mejor protección ofrece con 74,6 millones para 364.317 hectáreas. Le siguen Madrid con 39 millones y 438.262 hectáreas y, en tercer lugar, Galicia que destina 160 millones para prevenir y sofocar los incendios que pueden provocarse en sus más de dos millones de hectáreas de monte.

Pese a que el Ejecutivo gallego es, después del andaluz, el segundo que más invierte en materia de incendios, Galicia es una de las autonomías con las que más se ceban los incendios cada verano. El fuego calcinó en lo que va de año 6.000 hectáreas de los montes gallegos, de las que más de 1.700 se corresponden con zonas protegidas de la Red Natura. Esta cifra supone el triple de la superficie arrasada el año pasado, que se cerró con 2.003 hectáreas afectadas. El peor dato de la década es el de 2011, con 42.206 hectáreas calcinadas, aunque en 2012 y 2013 las llamas quemaron también casi 20.000 hectáreas.

A la cola de la inversión y muy lejos de los más de 160 millones que invierten Galicia o Andalucía se sitúan regiones como Murcia, País Vasco, Canarias, Cantabria y La Rioja, cuyo presupuesto en incendios oscila entre los ocho y los diez millones. La superficie forestal en estas autonomías no supera en ningún caso las 600.000 hectáreas frente a los más de dos millones con los que cuentan Galicia o Aragón o los más de cuatro millones en Andalucía o Castilla y León.

El Pladiga de la Xunta recoge en cuanto a medios humanos los mismos del ejercicio pasado: unas 5.767 personas del Servizo de Prevencióne Defensa contra os Incendios Forestais (Spdcif) reforzadas por el personal del Ministerio de Agricultura, el Ejército y fuerzas de seguridad del Estado, hasta sumar unos 7.000 efectivos. El documento que recoge la inversión del Ejectivo autonómico en incendios incluye además como medios materiales 32 medios aéreos de la Xunta y el Estado y 360 motobombas. A pesar de la inversión realizada por Medio Rural, los grupos de la oposición consideran que el dispositivo es "insostenible e inoperativo". Reclaman que se destine más dinero a prevención, ya que la extinción acapara más del 60% del presupuesto con 101 millones.