Galicia es la comunidad que presenta una mayor proporción de carreteras consideradas de riesgo elevado, con el 19 por ciento de sus vías, seguido de Cataluña y Asturias con el 18,9 y 18,8 por ciento, respectivamente.

Un total de 3.506 kilómetros, de los 24.803 analizados de la Red Nacional de Carreteras del Estado, presentan niveles de riesgo elevados, según se desprende del duodécimo informe EuroRAP, en el que ha participado el Real Automóvil Club de España (RACE).

Aún así, las conclusiones del documento destacan la existencia de una evolución positiva en este aspecto, ya que los kilómetros de riesgo elevado en 2014 sumaban 3.948 y suponían el 16 por ciento de las vías españolas, frente al 14,7 por ciento registrado en la actualidad.

El programa europeo de evaluación del riesgo en la carretera, EuroRAP, analiza la peligrosidad de las vías teniendo en cuenta la evaluación de los siniestros durante los tres últimos años, su gravedad y su relación con las características de la vía. El resultado se estructura según un 'Índice de Riesgo', definido como el número de accidentes mortales y graves ocurridos en un tramo por cada 1.000 millones de vehículos/kilómetro.

Para el resultado, se han tenido en cuenta un total de 4.582 accidentes ocurridos en la Red de Carreteras del Estado durante los años 2012, 2013 y 2014, de los cuales, 1.139 son accidentes mortales con un saldo de 1.321 fallecidos, y 3.443 fueron accidentes graves con un saldo de 4.553 heridos graves.

Todos estos accidentes se han asignado a 1.386 tramos de vías con una longitud total que suman más de 24.803 kilómetros. Al analizar cómo se distribuyen los tramos de la red en función del 'Índice de Riesgo', se observa que un 70 por ciento de los tramos presentan un riesgo bajo o medio-bajo, seguido del 16 por ciento que presenta un riesgo medio.

208 tramos de riesgo

En cuanto a los más preocupantes, los de riesgo elevado, el estudio indica que existen 208 tramos, que sumarían los 3.506 kilómetros catalogados con este nivel. De estos tramos, 83 secciones (1.255 kilómetros) serían de riesgo alto o tramos negros, donde se han producido una media de 274 accidentes mortales y graves cada año, dejando 71 fallecidos y 268 heridos graves anuales.

EuroRAP ha señalado también que la intensidad de circulación en estos tramos de riesgo no es muy elevada, con una media de 3.469 vehículos al día.

El primer tramo de riesgo de 2015 es el ubicado en la N-320 entre los kilómetros 314.1 y 325.4, entre Casar de Talamanca (Guadalajara) y el cruce con la M-103 a Algete (Madrid). En sus 11,3 kilómetros de longitud se han producido 10 accidentes graves en los 3 años objeto de estudio, con un resultado de 2 fallecidos y 12 heridos graves.

De estos 10 accidentes mortales y graves, 6 corresponden a usuarios de ciclomotores y motocicletas, siendo por tanto uno de los tramos de mayor riesgo para este colectivo de las dos ruedas. La intensidad media diaria de vehículos es de 3.286 al día.

Mejora de la seguridad

En comparación a informes anteriores, se sigue constatando la mejora en la seguridad de las vías del país, ya que año tras año ha ido incrementando el número de tramos de carreteras catalogadas como de riesgo bajo, y por otra parte se van reduciendo los kilómetros de carreteras de mayor riesgo, según apunta el informe.

A su juicio, es la separación de carriles mediante medianas, los cruces a distinto nivel, una mejor señalización e iluminación, y unos arcenes, zonas de escape y barreras de protección, lo que evita muchas de las tan temidas salidas de vía. Esto hace que las autopistas y autovías sean las vías más seguras, ya que se reduce la probabilidad de sufrir un accidente, y si se produce, las consecuencias del mismo serán menores.

El perfil de tramo con nivel de riesgo elevado correspondería a una carretera convencional de calzada única, con intersecciones al mismo nivel y con una intensidad media de vehículos por debajo de 10.000 al día. El documento explica que todos los tramos negros corresponden a carreteras con entre 2.000 y 10.000 vehículos día.

Mayor siniestralidad en motocicletas

Del mismo modo, EuroRAP apunta que, a nivel general, ha descendido el número total de accidentes mortales y graves, aunque el peso de las motocicletas en el total de la accidentalidad mortal y grave se ha incrementado. Así, desde el año 2003 se ha triplicado la representatividad del colectivo de motoristas en la accidentalidad total, pasando de un 7,8 por ciento en 2003 hasta un 20,8 por ciento en el año 2014.

En este sentido, de los 20 tramos de mayor accidentalidad mortal y grave de motoristas, que suman una longitud de 541 kilómetros, se producen 182 accidentes de este colectivo, lo que representa un 18,9 por ciento del total de los 960 accidentes en los que se han visto implicados ciclomotores y motocicletas.

Para el resto de vehículos, los accidentes sufridos en los 20 tramos de mayor siniestralidad representarían el 10 por ciento del total de accidentes para toda la red. Para los expertos, este dato refleja que la lesividad de los motoristas está más concentrada en tramos concretos de las vías.