El voto de los jóvenes que se marcharon de Galicia en búsqueda de una oportunidad laboral ha permitido a En Marea irrumpir en las provincias de A Coruña y Pontevedra como segunda fuerza de la emigración en las elecciones generales. En Galicia, la candidatura de Podemos, Anova y Esquerda Unida se ha quedado a diez papeletas del PSdeG, que repite como segunda fuerza en el voto exterior.
El partido con más apoyos en la diáspora gallega es el PP. El 20-D la participación de la emigración descendido, al pasar de, 4,2% de 2011 al 2,5% en esta cita electoral. Solo 11.084 emigrantes emitieron su voto, de los 23.036 que habían hecho todos los trámites para solicitar la documentación y de los 440.271 que tenían a derecho a participar desde el extranjero.
La reforma del voto exterior, que retiró el derecho de sufragio a la emigración en las elecciones municipales e la impuso la obligación de que éste sea rogado ya había supuesto en 2011 un desplome de la participación, pasando del 35,14% de 2008 al 4,21%. La tendencia se ha acentuado y en estos comicios se ha reducido al 2,5%. Al bajar tanto la participación desde el exterior, el recuento no ha mudado el reparto de escaños, que en Galicia son 10 para el PP, seis para el PSdeG, seis para En Marea y uno para Ciudadanos.
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El voto de la emigración siempre ha sido un voto al poder: el partido más votado por los que viven fuera de Galicia es el que está en el Gobierno en el momento de la cita con las urnas. Y así la fuerza más votada el 20-D entre los electores de la diáspora fue el Partido Popular, con el 40% de los votos, pero 8 puntos menos que hace cuatro años.
Sin embargo, ante el rejuvenecimiento del colectivo emigrante, En Marea ha sido capaz de situarse como segunda fuerza, dejando al PSdeG en tercera posición en las provincias de A Coruña y Pontevedra. A nivel autonómico, los socialistas siguen siendo los segundos con más sufragios en el voto de la emigración, cuyo resultado ayer se hizo público, pero solo diez papeletas separan al PSdeG de En Marea.
Los socialistas reúnen el 20,6% de los sufragios de la diáspora, casi 17 puntos menos que en 2011, y En Marea irrumpe con el 20,5%. Son 2.291 votos frente a 2.281. En Galicia, En Marea logró superar en votos, pero empató en escaños con el PSdeG, y así posicionarse como segunda fuerza con más apoyos el 20-D, por detrás de los populares.
El BNG durante años intentó hacerse un hueco entre los emigrantes, y le costó mil esfuerzos y los resultados siempre eran amargos. En las elecciones del 20-D sumaron bajo la marca NÓS, 398 papeletas, el 3,6%, frente a las 792 de hace cuatro años.
Un cambio en el perfil de diáspora, con jóvenes que han hecho las maletas durante la crisis, ha permitido ahora a En Marea irrumpir con éxito. Esta candidatura, y especialmente Podemos, fueron muy activos en las redes sociales, ya en las elecciones municipales de mayo, intentando movilizar a los jóvenes emigrantes y captar su voto de protesta. De hecho, en esta campaña denunciaron las dificultades para participar en los comicios, al ser el voto rogado, un lío burocrático que garantiza la limpieza del voto, pero dificulta enormemente el proceso.
Los partidos que impulsaron la reforma del voto de la diáspora para introducir más garantías democráticas ahora empiezan a pensarse en la marcha atrás o buscar nuevos mecanismos para facilitar la participación de los emigrantes. En Marea ha logrado un total de 950 papeletas en A Coruña, el 23,8% de los votos, y en 814 Pontevedra, el 22,7%. En las provincias del interior, sin embargo, la cosecha de votos descendió, un 16,6% en Lugo y un 13% en Ourense. El PSdeG logró reunir el 24% de los sufragios y el 21% en estas circunscripciones.
El PP que repite como la fuerza más votada. En A Coruña, sumó 1.457 sufragios, el 36,6% de los apoyos de la diáspora. Consiguió 4.436 votos. 1.399 son de emigrantes de la provincia de Pontevedra, donde logró el 39% de las papeletas emitidas desde el exterior. En Ourense, reunió 428 papeletas, el 21% , y en Lugo sumó 359 sufragios, el 24%.
Ciudadanos
El partido de Albert Rivera, la otra fuerza emergente con Podemos, en la emigración gallega ha logrado 942 papeletas, el 8,5% de los votos del exterior. La mayoría proceden, igual que En Marea, de Pontevedra y A Coruña: 814 papeletas y 950, respectivamente. Ciudadanos obtuvo más respaldo entre los emigrantes gallegos que el BNG. Lo mismo sucedió en la comunidad. Ciudadanos superó en votos y escaños, logró uno, a los nacionalistas gallegos, que en esta ocasión se han quedado fuera de las Cortes, tras veinte años de representación. Hubo además 635 papeletas para otras formaciones políticas.
