"En cinco meses yo estaré sentado en la Presidencia y usted estará en la oposición". La frase del portavoz parlamentario del PSdeG, José Luis Méndez Romeu, al titular de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, durante su cara a cara en el Parlamento evidenció la presencia tanto del ambiente electoral en estos enfrentamientos, como de las primarias socialistas, a las que el primero se presenta.

Romeu marcó territorio desde la Cámara autonómica para impulsar su mensaje de encarnar una alternativa a Feijóo, con el que aspira a ser elegido candidato de su partido en las autonómicas de octubre. Lo hizo tras atacar los recortes y el legado del presidente al frente del Ejecutivo, al que llegó en 2009. "Para usted es tarde: toca alternancia porque usted fue sordo y ciego a las demandas de la gente y prefirió trabajar exclusivamente para su vanidad y crecimiento personal", atacó. "No lo quieren en Madrid ni en la empresa privada", finalizó en alusión a los destinos que descartó Feijóo para optar a un tercer mandato en la comunidad.

Entre las risas de las bancadas populares y del propio Feijóo, Méndez Romeu atribuyó esta reacción a que al líder del PP gallego le entra "la risa floja de la inseguridad". El dirigente popular replicó incidiendo, como hizo en anteriores sesiones, en la batalla interna socialista y aseguró que el partido se encuentra "en una carrera de autodestrucción". Feijóo profundizó además en las diferencias sobre la estrategia electoral del PSdeG. "¿Usted está a favor o en contra de gobernar con las mareas de Podemos?". Sobre las mareas también se pronunció ayer la presidenta de la Diputación de Pontevedra, Carmela Silva, que considera que estos partidos "también son el adversario político" de su formación, ya que "representan el populismo". En cuanto a las primarias en el PSdeG, Silva aprovechó para mostrar su apoyo "con toda claridad" a Méndez Romeu porque, en su opinión, es "el garante de la unidad" de la formación.

El otro candidato a las primarias del PSdeG Xaquín Fernández Leiceaga remitió una carta a la militancia en la que deja patente su "apuesta por la renovación para transformar la sociedad desde el gobierno" y por la "unidad" en el partido de cara a obtener "un buen resultado" en las próximas citas con las urnas. Reivindica el trabajo de los expresidentes socialistas de la Xunta Fernando González Laxe y Emilio Pérez Touriño y se compromete a ser "el candidato de todos y a no ser un candidato contra nadie".