Calor. Mucho calor. Pero en las zonas costeras un poco menos de lo que los meteorólogos auguraban el lunes. El martes quedará registrado en los anales de las temperaturas en muchos puntos de Galicia como el día de septiembre más caliente desde que hay registro.

La localidad pontevedresa de Arbo fue el punto más caliente de la comunidad, al alcanzar los 42 grados. Muy de cerca le siguieron numerosas localizaciones de la provincia de Ourense: la propia capital, que llegó a los 41,6 -superando aquel 41,1 del 5 de septiembre de 2006- y las localidades de Ribas de Sil y Leiro, que llegaron a los 41,9.

En cambio, en otros lugares no se llegaron a la temperatura que estaba prevista. En la ciudad de A Coruña tampoco se alcanzaron los 32 que se esperaban, sobre todo por la presencia de la niebla y del viento. Finalmente, el mercurio ascendió hasta los 27,2 en el centro de la ciudad, mientras que en la Torre de Hércules se quedó tan solo en 22,2 grados. Sin embargo, en el interior de la provincia, sí subieron mucho más las temperaturas, como en Melide, con 38,7 grados y, sobre todo, el concello de Boqueixón, que superó los 40.

"Las zonas pegadas al mar no alcanzaron las temperaturas previstas, aunque hizo igualmente mucho calor para esta época del año", aseguró María Souto, predictora de MeteoGalicia.

Sin embargo, como apunta su compañero Lino Naranjo "no había más que adentrarse al interior diez kilómetros para encontrarse con temperaturas mucho más altas, como sucedió en Arbo, en Tui o en Salceda, todas ellas con 40 grados".

Especialmente llamativas resultaron para los expertos las altas temperaturas en lugares en los que es mucho más extraño encontrarlas, como los 39,5 de Santiago (donde también se superó el máximo histórico, que estaba en los 38,4 del año 2006), los 37 de la zona montañosa de A Fonsagrada o los 36º de Vilalba.

La situación se comienza a templar hoy con la entrada de una pequeña borrasca muy débil, pero lo suficiente para lograr que con el avance del día se vaya retirando el aire cálido. Así, MeteoGalicia anuncia cielos poco nublados o despejados en general, con entrada de nieblas costeras por las Rías Baixas, con posibilidad de lluvias débiles en el litoral atlántico extendiéndose hacia el interior, de modo ocasional por la noche. Las temperaturas mínimas ascenderán ligeramente por lo que se espera una madrugada muy cálida, mientras que las máximas descenderán de manera moderada o notable. En A Coruña tan solo se esperan 23 grados, mientras que en Vigo se quedarán en 28; en Pontevedra en 26º, en Santiago bajarán diez grados respecto a ayer y se quedará en 29 . Los vientos soplarán flojos del sur en las primeras horas e irán girando a componente oeste.

Durante la jornada del jueves se recuperará la influencia anticiclónica sobre Galicia aunque con régimen de vientos muy flojos de componente oeste. Con esta situación, se esperan por la mañana intervalos de nubes con bancos de niebla en zonas de interior, que darán paso a cielos poco nublados o despejados, con algunas nubes de evolución en zonas altas del este.