La cifra de personas fallecidas en Galicia en accidentes de tráfico aumentó un 17,2 por ciento hasta septiembre en comparación con el año anterior, hasta las 75 personas, mientras que el número de accidentes mortales creció en el mismo periodo un 18 por ciento, hasta 72.

Según los datos hechos públicos este lunes por la Dirección General de Tráfico, durante los primeros nueve meses del año todas las provincias gallegas registraron incrementos en estos indicadores excepto A Coruña, donde los accidentes mortales disminuyeron un 7,4 por ciento, al pasar de 27 a 25; y las víctimas --de 29 a 25--, un 13,8 por ciento.

Por su parte, la cifra de víctimas en Lugo se duplicó en comparación al año anterior, al pasar de 10 a 20, y los accidentes crecieron un 80 por ciento, hasta los 18. En Ourense también se incrementaron los accidentes mortales un 80 por ciento, hasta los nueve y la cifra de fallecidos pasó de cinco a nueve. Finalmente, la provincia de Pontevedra registró 21 víctimas mortales --un 5 por ciento más-- y 20 siniestros.

En lo que va de año, los meses en los que se han registrado un mayor número de accidentes mortales han sido febrero --con 14-- y julio --con 14--. El 34,7 por ciento de estos siniestros tuvo lugar en A Coruña, el 27,8 por ciento en Pontevedra, el 25 por ciento en Lugo y el 12,5 por ciento en Ourense.

Disminuyen en septiembre

Por el contrario, tanto la cifra de siniestros como el número de fallecidos en la carretera en Galicia han descendido en septiembre en relación al mismo mes del año anterior.

En concreto, el número de accidentes ha caído un 28,6 por ciento, hasta los cinco; y las víctimas han disminuido un 25 por ciento, hasta seis.

Por provincias, en septiembre fallecieron tres personas en accidente de tráfico en Pontevedra, dos en A Coruña y una en Lugo. A Coruña y Pontevedra registraron la misma cifra que hace un año, mientras que en Lugo bajó el número de fallecidos.

Según el tipo de accidente, en septiembre los más frecuentes fueron las colisiones, seguidas de las salidas de vía y los vuelcos. Dos de los fallecidos tenían entre 36 y 45 años, otros dos entre 46 y 55, uno entre 56 y 65 y una de las víctimas mortales era mayor de 65 años.