El plan de seguros agrarios para 2017 del Gobierno supondrá un recorte de 10 puntos en las subvenciones para todas las líneas, lo que acarreará un encarecimiento de las pólizas de entre un 10 y un 30% dependiendo del cultivo y de la modalidad de contratación elegida por el agricultor, según advierten los sindicatos.

En 2015, los agricultores gallegos suscribieron 54.770 pólizas de este tipo por un importe total de 28,4 millones. De ellos, 7,6 millones (el 27%) fueron subvencionados por la Entidad Estatal de Seguros Agrarios, dependiente del Ministerio de Agricultura. Otros 3,9 millones (13,9%) los aportó la Xunta, mientras que 16,7 millones (el 58,9%) los abonó el tomador del seguro.

El sector agroganadero se queja de que la partida del Gobierno central, que casi supone un tercio del total de la prima, se va a reducir en 10 puntos. Por una parte, afirman que uno de los objetivos que persigue el Ministerio de Agricultura con su plan para el año que viene es fomentar la implantación del seguro agrario y su universalización pero, por otro, se desincentiva la contratación del seguro por la reducción de las subvenciones.

Esta medida, explican, supondrá un encarecimiento del seguro para el agricultor y provocará que muchos dejen de asegurar sus cosechas porque el coste será "inasumible". También reconocen que el encarecimiento del seguro expulsará del sistema a aquellos con menos riesgo en sus explotaciones, mientras que los que tengan más riesgo seguirán contratando el seguro agrario.

La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) afirma que el coste del seguro agrario podría "dispararse" por encima de los 2.000 euros por explotación, si se aprueban los recortes de subvenciones previstos en el borrador del plan nacional de aseguramiento para 2017.

Por ejemplo, un agricultor profesional de cereza que asegura 17.000 kg y cuyo importe de seguro para el plan anterior fue de 3.277 euros, tendrá que hacer frente a un coste de alrededor de 4.000 euros para asegurar la misma cosecha en el plan 2017, lo que supone un aumento del 20% de la prima.

Para un productor de uva de mesa que abonó la cantidad de 8.151 euros en la contratación de la póliza tendrá que destinar algo más de 10.000 euros para asegurar su cosecha en el plan 2017, lo que supone un encarecimiento del 30 %.

En el caso de un productor de cítricos que contrató el seguro para su cosecha de 350.000 kg de naranja y abonó 3.265 euros, con la reducción de las subvenciones propuesta por Enesa para la próxima campaña tendrá un coste de 3.955 euros, lo que significa un aumento del 21% en el coste del seguro. En 2013, 2014 y 2015 se redujo la contratación de las pólizas agrarias debido a la disminución de las ayudas y cuando éstas volvieron a aumentar en 2016, también se elevó el volumen de seguros. Los sindicatos reclaman al Ministerio de Agricultura que reconsidere este recorte.