El Tribunal Constitucional (TC) ha anulado el impuesto municipal sobre las plusvalías, que en teoría grava la revalorización de los inmuebles cuando son vendidos pero en la práctica es abonado siempre, aunque hayan perdido valor. Esta circunstancia desencadenó una avalancha de recursos en siete comunidades (Andalucía, Cataluña, Madrid, Castilla-La Mancha. Comunidad Valenciana, País Vasco y Navarra) y ahora el TC anula este impuesto.

La sentencia dictada por el pleno del TC obligará a reformar este impuesto local, técnicamente denominado Impuesto sobre el Incremento del Valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana, una importante fuente de ingresos para los ayuntamientos. En Galicia los concellos se enfrentan a devoluciones millonarias. Los ayuntamientos gallegos recaudaron en 2015 más de 41 millones por este tributo. La recaudación en los municipios gallegos aumentó un 9% pese a la crisis del ladrillo.

Los alcaldes proponen revisar el impuesto de plusvalía para evitar que se pague si no hay ganancia en una venta.