La carga de trabajo se reduce año tras año en los juzgados del país. La caída de pleitos derivados de la crisis económica y la reforma penal que evita que los delitos sin autor conocido lleguen a los tribunales ha descongestionado hasta un 25% los órganos judiciales de la comunidad. El año pasado, los litigantes gallegos llevaron a los juzgados un total de 334.441 asuntos -una medida de 916 cada día-, lo que supone 108.500 menos que los 453.003 tramitados el ejercicio anterior.

El ámbito penal es el que registra un mayor desplome en las causas abiertas en Galicia: un 36,4% menos que en 2015 -un total de 177.471 expedientes tramitados frente a los más de 279.000 del año anterior-, según el informe Situación de los órganos judiciales en el año 2016 hecho público ayer por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). Detrás de este descenso está la entrada en vigor en diciembre de 2015 de la reforma de la Ley de Enjuiciamiento Criminal (Lecrim), por la cual las causas se clasifican en sencillas o complejas y los atestados en los que no hay autor conocido del delito denunciado ya no se remiten a los juzgados.Resolución

La reforma de la Lecrim también se ha traducido en una mayor tasa de resolución. En el conjunto de la comunidad, los órganos judiciales resolvieron un total de 347.662 asuntos frente a los más de 334.000 ingresados, lo que supone cuatro puntos por encima de los tramitados. El año anterior, los tribunales gallegos abrieron casi 443.000 causas y resolvieron 453.000, apenas 2,3 puntos más de los ingresados. Al cierre de 2016, los órganos judiciales de la comunidad tenían pendientes por resolver 123.833, casi 12.500 menos que las 136.330 que acumulaban en 2015 (un 9% menos).

La tasa de litigiosidad, que mide el número de asuntos ingresados por cada mil habitantes, se sitúa en Galicia en 123, un balance que coloca a la comunidad por debajo del índice registrado por los tribunales y juzgados del país (124,9) y en el noveno puesto por la cola.

A la cabeza de la litigiosidad, se encuentran los órganos judiciales de Canarias (158,7 por cada mil habitantes), seguidos de Andalucía (145,5), Baleares (135,2), Murcia (128,9) y Comunidad Valenciana (127,9). En el extremo opuesto de la tabla están La Rioja (84,4), País Vasco (86,9) y Navarra (94,3).

En cuanto a las sentencias pendientes de ejecutar, los juzgados gallegos cerraron el ejercicio pasado con un total de 120.386 frente a las más de 123.000 que no se habían resuelto un año antes. La tasa de fallos dictados en 2015 fue sin embargo más elevada que la registrada el año pasado, ya que se ejecutaron cerca de 79.000 sentencias frente a las apenas 70.000 de 2016.

Jurisdicciones

Jurisdicciones

Junto con la caída de asuntos en el ámbito penal, la jurisdicción civil -reclamaciones por impagos y de deudas- también experimentó un descenso el año pasado en la comunidad. Un total de 116.308 asuntos de esta índole llegaron a los juzgados gallegos, un 10,6% menos que el ejercicio anterior. Y el volumen de resueltos en este ámbito superó los 120.000 y los pendientes no llegaron a los 54.000.

Por el contrario, los pleitos contra la administración en Galicia se incrementaron un 2,8%, mientras que en el conjunto del país disminuyeron (-1,3%). En total, 9.985 casos nuevos, con más de 11.500 asuntos resueltos y casi .6400 sin resolver al cierre del ejercicio.

En contra de la tendencia general de los juzgados de lo social españoles -centrados en conflictos laborales-, que disminuyeron los asuntos ingresados un 4,3%, los tribunales gallegos registraron un repunte del 1,6%: 30.647 expedientes. Los asuntos resueltos en esta jurisdicción sobrepasaron los 32.000 y en trámite fueron casi 26.000.