Solo un 20% de los pasajeros que viaja en autocares se abrocha el cinturón de seguridad, según un informe de la Fundación Mapfre. Su no utilización está detrás de gran parte de las lesiones graves y mortales que se producen en este medio de transporte, aunque desde la Fundación Mapfre insisten en que el autobús es 10 veces más seguro que el automóvil y hasta 300 veces más que las motocicletas.

El estudio ha sido presentado por el director de Prevención y Seguridad Vial de Fundación Mapfre, Jesús Monclús, en una rueda de prensa junto con el presidente de la Confederación Española de Transporte de Autobús, Rafael Barbadillo, y el responsable de seguridad de ALSA, Eduardo Mayoral. Los participantes destacaron que el sector del autobús invierte anualmente 490 millones en la renovación de sus flotas y ocho millones en la formación de los conductores y han recordado que el cinturón de seguridad reduce entre un 20 y un 80% la probabilidad de sufrir lesiones graves y mortales.