El sector inmobiliario continúa con su recuperación en Galicia. Si tras cuatro años de caídas, en 2015 volvió a la senda del crecimiento y se anotó un 3,9% de subida y continuó en 2016 con un incremento que casi rozó el 7%, el arranque de 2017 consolida esta tendencia al alza. Sin embargo, el comportamiento del mercado es diferente en cada provincia y también en el tipo de casas que se venden. La compraventa de viviendas aumentó un 3,7% en los dos primeros meses del año en la comunidad con respecto al mismo periodo del año anterior hasta alcanzar las 2.369 operaciones, según los datos que publicó ayer el Instituto Nacional de Estadística (INE).

El incremento se produce gracias a las transacciones de viviendas usadas, que además de suponer tres de cada cuatro inmuebles que se intercambian en la comunidad, aumentaron un 13,7% en enero y febrero (de 1.516 a 1.724). Por el contrario, la venta de viviendas nuevas cayó un 16% (de 768 a 645). El mercado inmobiliario gallego, además, está copado por la vivienda libre. De las 2.369 casas que se vendieron en los dos primeros meses, solo 146 eran protegidas y el resto, libres.

En febrero, la compraventa de viviendas cayó un 5,9% en Galicia con lo que se rompe la tendencia de cuatro meses seguidos de aumentos. Con este dato, se situó como la tercera comunidad en la que más bajaron las transacciones de casas y pisos en el segundo mes del año, por detrás de País Vasco (15,7%) y Cantabria (9,6%). La media nacional creció un 1,2%.

Pero el sector no solo presenta un comportamiento diferente en cuanto a la tipología de casas que se venden, también posee diferencias en cada una de las cuatro provincias. El crecimiento de las transmisiones en Galicia en los dos primeros meses se debió, sobre todo, al alza que se produjo en las provincias de Ourense y Pontevedra y, en menor medida, en la de Lugo. El incremento gallego se vio lastrado, en cambio, por A Coruña donde cayó la compraventa en el acumulado de los dos meses.

Ourense y Pontevedra lideraron el crecimiento en la venta de inmuebles con un 18,5% y un 18,1%, respectivamente. En ambos casos, la vivienda usada creció por encima del 22%. En Lugo también aumentó el total de viviendas, un 5,6%, aunque la nueva cayó un 22%.

Pero el incremento gallego hubiese sido mayor si las transacciones en la provincia de A Coruña se hubiesen comportado de otra manera. El total de las ventas de viviendas cayó un 9,4% en esta provincia. A Coruña es además la que más peso tiene en el sector inmobiliario, ya que cuatro de cada diez transacciones que se produjeron en Galicia en los dos primeros meses del año fueron en esta provincia. La caída en A Coruña vino motivada, sobre todo, por el desplome en la venta de vivienda usada (-33%), mientras que la nueva creció un 2,7%.

A nivel nacional, la compraventa de viviendas aumentó un 1,2% en febrero hasta sumar 35.610 operaciones. Este incremento, con el que se encadenan 13 meses consecutivos de alzas interanuales, es muy inferior al experimentado en enero, mes en el que estas operaciones aumentaron un 18,1% y alcanzaron su cifra más alta en cuatro años.