La Consellería de Medio Rural simplificará la burocracia en las concentraciones parcelarias, rebajando de seis a tres las fases de cada procedimiento, y las concentrará en las zonas que afecten a explotaciones agrarias o ganaderas y que, por tanto, supongan impacto en el entorno rural. "No vamos a concentrar por concentrar. Eso acabó. Lo haremos donde hay actividad y dará igual que en un concello quede una parroquia sin concentrar", expuso ayer el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo.

Las concentraciones incluirán también los suelos de núcleos rurales y se abrirá la opción de permutas entre afectados. Medio Rural, que aplicará estos cambios mediante un decreto antes de fin de año, aspira a concluir esta legislatura 130 procesos que afectan a 116.000 hectáreas y 92.000 propietarios.