Santiago B. L., de 29 años, lleva 13 meses en prisión preventiva por una oleada de 12 incendios provocados con una diferencia de 26 horas, el 8 y 9 de junio de 2016, en los municipios de Cartelle, Barbadás y San Cibrao de Viñas. Ayer fue a juicio, acusado de un delito continuado por el que se enfrentaba a 5 años y medio de cárcel. La pena se le rebaja a dos años gracias a un pacto de conformidad entre la defensa y la Fiscalía.

El acusado asume los hechos y el castigo se reduce en aplicación de una eximente incompleta de enajenación mental. Según los forenses, padece un trastorno mixto de la personalidad "que limita de un modo relevante su capacidad intelectiva y volitiva".

La condena incluye una multa de 600 euros, el pago de los gastos de extinción así como una medida de libertad vigilada. Durante 5 años, tendrá la obligación de someterse a un tratamiento psiquiátrico y psicológico Cada dos meses se enviará un informe de seguimiento al juez de vigilancia penitenciaria y también al magistrado ponente de la Audiencia Provincial. Si incumple la medida, cometerá un delito de quebrantamiento de condena.

La rebaja de la pena, sumada al tiempo que ya ha cumplido entre rejas, aumenta la probabilidad de que Santiago B. L. pueda salir de prisión.