Feijóo entró en política de la mano de Romay Beccaría, que le fichó para el PP y le dio su primer puesto de alto cargo en la Xunta cuando era conselleiro de Agricultura en 1991. Veitiséis años después, su protegido, convertido ya en presidente de la Xunta y tras lograr tres mayorías absolutas en Galicia, impuso al que fuera su "padre político" la Medalla de Galicia. Feijóo no ocultó su emoción al referirse a Romay Beccaría y el exministro de Sanidad y actual presidente del Consejo de Estado también tuvo unas palabras de reconocimiento al actual titular de la Xunta: "A ese otro hijo que representa todos mis sueños políticos".

En todo caso, la lista de agradecimientos de Romay fue larga. Tras recibir la condecoración se lanzó a una enumeración exhaustiva que incluyó desde literatos como Borges o Baudelaire, a deportistas como Rafa Nadal, empresarios como Amancio Ortega, políticos como Felipe González o Fraga, pasando por los jesuítas, el Papa Francisco e incluyendo las vacas y las madres gallegas.

"Comparece hoy aquí rodeado de amigos", dijo Feijóo en alusión a Romay. "Los que encontró en los libros (...) pero también los que encontró en sus paisanos de Betanzos, en las aldeas y concellos de la provincia de A Coruña, de Galicia y de España. Tierras a las que sirvió con lealtad", declaró emocionado Feijóo.

Y si el presidente de la Xunta habló así de su padre político, María del Mar Blanco recordó también a sus progenitores, ourensanos de origen. "No solo es un honor recibir este premio por mi hermano sino también por mis padres que emigraron y nunca olvidaron su tierra porque se siente gallegos", afirmó. Las Medallas de Galicia contaron con la actuación del grupo de baile Nova Galega Danza y el acto finalizó con el Himno de Galicia, interpretado por el tenor Enrique Alberto Martínez Rivero. En el exterior, un grupo de manifestantes protestó contra la reorganización de centros educativos.