El Concello de Santiago de Compostela ha instalado bolardos en la calle peatonal de San Francisco, uno de los accesos directos a la Plaza del Obradoiro. Era una medida ya prevista en los presupuestos municipales de este año, pero también de una demanda del Sindicato Unificado de Policía tras los atentados en Cataluña.

La calle continuará abierta a vehículos autorizados o de emergencia pero la circulación será "muy lenta".