Galicia fue en 2016, tras Madrid, la segunda comunidad con la tasa más baja de menores condenados, con 4,5 por cada 1.000 habitantes. Lideraron la clasificación Baleares y Canarias con 11,4 y 11,1, respectivamente En total, fueron 380 menores condenados en Galicia por cometer 661 infracciones penales: 629 fueron delitos y 32 faltas.

En el conjunto estatal, el número de menores condenados por sentencia firme descendió un 7,5%, mientras que en la comunidad gallega la caída fue del 20%.

Al igual que sucede con los adultos, la mayoría fueron varones (73%, siete puntos menos que a nivel nacional) mientras que por edades, dos tercios de los condenados tenían entre 16 y 17 años y hubo mayoría de españoles entre los sentenciados.

La mayoría de los delitos cometidos por menores fueron los robos (25,9%), los delitos de lesiones (21,3%) y las torturas y contra la integridad moral (8,6%),

Atendiendo al número de infracciones cometidas, el estudio revela que dos de cada tres menores condenados cometieron una única infracción penal y uno de cada tres realizó más de una.

En cuanto a las medidas adoptadas, de los datos se desprende que en 2016 los jueces gallegos adoptaron 748. Las más frecuentes fueron la libertad vigilada, la prestación en beneficio de la comunidad y la de internamiento en régimen semiabierto.

Por autonomías, Andalucía fue la que más menores condenados registró (23%) seguida por la Comunidad Valenciana (15,1%) y Cataluña (11,8%). Este orden se mantuvo en el caso de menores de nacionalidad española pero no en el de extranjeros. En este caso se colocó Cataluña en primera posición (21,6%).