El 7 de septiembre de 2007 el puerto de Ferrol se puso de largo. Fue la primera vez que un barco atracaba en sus muelles. Había comenzado a construirse seis años antes y su coste rondó los 200 millones.

Diez años y ocho días después de su inauguración, arrancaron ayer las obras de la conexión ferroviaria con el puerto exterior ferrolano. Es una infraestructura muy anhelada, después de que la segunda fase del puerto no se finalizase hasta 2010. Eso sí, la operatividad de la dársena ha estado siempre muy lastrada por la ausencia de esta conexión ferroviaria y porque la carretera de acceso no fue inaugurada hasta 2009.

La ansiada infraestructura ha tardado una década en comenzar y, al menos, tardará unos cuatro años en finalizarse. El plazo de ejecución es de 46 meses, así que hasta principios de 2021, si no hay retrasos, no se podrá utilizar. "Parece mucho, pero un macizo de granito cuesta mucho", reconoció ayer el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, que presidió el inicio de las obras.

El ministro se refería al túnel de 5,6 kilómetros, de un trazado de 6,4, que discurrirá bajó los montes de Brión. Es la mayor dificultad de la obra, además de un viaducto de 300 metros que se construirá sobre la ensenada de A Malata.

Gracias a esta obra, los dos puertos ferrolanos, el interior y el exterior, quedarán unidos a través de un ramal ferroviario de doble ancho de 6,4 kilómetros, de los que 5,6 serán un túnel que ayer comenzó a perforarse. Contará con una galería de evacuación paralela a la vía férrea. El coste total ronda los 73 millones.

No fueron las únicas cifras que ofreció ayer Íñigo de la Serna en su visita a Ferrol. El ministro de Fomento comprometió para Galicia "una inversión de más 250 millones, en los distintos puertos y en diferentes actuaciones" hasta 2021. A esta cifra hay que restarle los 73 millones que costarán las obras de acceso ferroviario al puerto exterior ferrolano.

De la Serna explicó que esta obra no se trata de "un proyecto hecho realidad, pero sí de uno en el que se trabaja para que más pronto que tarde podamos regresar".

A su juicio, las obras "van a mejorar mucho la competitividad de este puerto" y suponen "la ejecución de un ramal singular; la mayor parte va en túnel". Según el ministro de Fomento, con este proyecto se realiza un "esfuerzo importantísimo para que afecte lo mínimo posible al entorno".

Por su parte, el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, consideró que la conexión ferroviaria permitirá a la rada "poder competir con cualquiera" y ensalzó el proyecto como "salvaguarda del paisaje".

Feijóo, que se refirió al de Ferrol como "un gran puerto" llamado al liderazgo en el tránsito de contenedores, aplaudió una "obra de enorme envergadura" cuyo trazado discurre en "más del 80% en túnel; hay pocas posibilidades de mejorar el impacto".

También subrayó la "esbeltez" del viaducto previsto en la ensenada de A Malata, una "obra muy difícil" que permitirá "conectar el centro de Ferrol con el puerto".

A su juicio, la senda ferroviaria derivará de una labor "que no va a parar; habrá 3 turnos, 24 horas, 7 días a la semana".

"Se podrá acabar cuando los técnicos sean capaces", agregó, sin descuidar la obligación de "horadar ese macizo de granito".