Mientras continua el debate sobre el traspaso de la AP-9 y la subida del 3,1% de los peajes a partir del 1 de enero, la vía que vertebra la comunidad de norte a sur se utiliza más cada día. Olvidado ya el recorte de tráfico durante la crisis, la autopista encadena 17 meses de aumento de tráfico, que si no hubiera sido por la caída del 0,1% de abril de 2015 (motivado por la Semana Santa) llevaría 50 meses (más de cuatro años) con incrementos consecutivos.

El buen comportamiento de la autopista se ha refrendado en el tercer trimestre del año, que abarca los dos meses de verano cuando el tráfico es mayor. Entre julio y septiembre la utilizaron de media cada día 27.227 vehículos. Es la mejor cifra de los últimos seis años. Hay que retroceder hasta 2011 para encontrar un dato más alto (27.741), según los datos del Ministerio de Fomento.

Detrás de este buen comportamiento están la recuperación de la economía y el aumento de los desplazamientos, especialmente de turismos, durante julio y agosto.

Los dos meses verano fueron muy buenos. De los mejores de los últimos años. En julio transitaron de media al día 27.798 vehículos. Fueron un 1,7% más que en julio del año pasado. La última vez que la AP-9 superó esta cifra en el séptimo mes del año fue en 2011 con 28.784.

Lo mismo ocurrió en agosto. El incremento con respecto al año anterior fue del 3,6%. Transitaron 28.883 vehículos. Hay que remontarse a agosto de 2010 para encontrar una cifra mayor (31.488). A falta del último trimestre, la autopista gallega camina hacia su cuarto año seguido en positivo. En 2014 cerró con un alza del 0,4%; en 2015; del 5,5% y en 2016, del 3,6%.

Mejor comportamiento tuvo aún la otra autopista de titularidad estatal que hay en Galicia, la AP-52 entre Santiago y el Alto de Santo Domingo (Ourense). En el tercer trimestre circularon de media al día 7.379 vehículos. Es el mejor dato desde que se abrió la vía en 2003.