"No siempre ocurre que el presentador es más conocido que el que habla". De esta manera señalaba el portavoz parlamentario del PP gallego, Pedro Puy, el "honor" de que haya sido el propio presidente de la Xunta quien le diera paso durante su intervención ayer en el Forum Europa. Efectivamente, no es muy habitual que Feijóo ponga el prólogo a otros conferenciantes y además en esta ocasión no escatimó en elogios hacia quien estuvo a su lado "desde los duros momentos de la oposición".

Destacó su vocación de servicio público y admitió abiertamente que si Puy no ha llegado a formar parte del Gobierno autonómico "fue porque no quiso, no por falta de oportunidades". Estas elogiosas palabras sumadas al hecho de que el presidente de la Xunta haya dicho que ésta será su última legislatura colocan a Puy en las quinielas ante una hipotética sucesión de Feijóo. Y así se lo preguntaron, cuestión ante la cual el portavoz parlamentario capeó con una metáfora: "Yo tengo ya una cierta edad y a ciertas edades, uno corre poco y echa pocas carreras".

Y además puntualizó que Feijóo nunca aseguró que ésta fuese su última legislatura. "Dijo que será a derradeira", matizó en alusión a que el uso de esta expresión en gallego no es tan definitivo como decir la última.

Feijóo, a su lado, guardó silencio. Antes, sin embargo, durante su turno de palabra dedicó buena parte de su discurso a alabar a "un hombre impermeable al sectarismo, capaz de relacionarse y de aprender de todos los pensamientos". Aludió a su presbicia, pero incluso para sacarle lustre: "ve mal de cerca pero bien en las medias y largas distancias. Con esta metáfora, contrapuso el talante de Puy con las políticas "cortoplacistas". "Hay que acompañarse de expertos en el regate corto pero también de políticos que piensen más allá del día de mañana", señaló el presidente de la Xunta.

Puy hizo una intervención extensa en la que defendió desde el papel del Parlamento llegando incluso a analizar las razones del auge de los populismos. Advirtió de la "involución" del BNG hacia posturas independentistas y consideró que Galicia es una "nación" desde el punto de vista cultural, pero no jurídico.