La batalla entre los candidatos a liderar el PSOE coruñés se recrudece. En la recta final de la campaña, la exedil de Santiago Mercedes Rosón elevó el tono contra su contrincante en la carrera que finalizará el domingo, con la elección del nuevo secretario xeral de los socialistas en la provincia. En un encuentro con militantes en la ciudad de A Coruña, Rosón volvió a cargar contra la acumulación de cargos que ostenta su rival en la pugna, Valentín González Formoso, presidente de la Diputación y alcalde de As Pontes. "Mezclar la Presidencia de la Diputación con la Secretaría de la Provincia no es bueno, no es democrático, no es socialista y no es lo que quieren nuestros votantes; ese no es nuestro modelo", sentenció Rosón.

Sin menciones al proyecto de la exconcejal ni a la críticas que durante los días de campaña lanzó contra su candidatura, Formoso apeló de nuevo a la unidad del PSOE en la provincia y pidió una "participación masiva de la militancia" el domingo. "Gane quien gane trabajaremos juntos para tener un partido fuerte de cara a las municipales de 2019", proclamó el presidente de la Diputación de A Coruña durante un acto en Santiago. "Hay mucha gente esperando el PSOE, no podemos defraudar y tenemos muy cerca el reto de la municipales; trabajaremos por tener un partido unido y reforzado en cada pueblo y en cada ciudad de la provincia; es lo que la gente espera de nosotros", reiteró el también alcalde de As Pontes.

En la sede del PSOE en A Coruña, Rosón volvió a defender el protagonismo de la militancia, a la que -dijo- debe devolverse el "poder". "Si queremos que los ciudadanos confíen en nosotros tenemos que mostrarnos como un partido de militantes y no como un partido de élites que acumulan poder", cuestionó. El PSdeG coruñés, según advirtió, necesita "mucho trabajo y dedicación". "Eso no puede hacerlo la otra candidatura; Valentín puede decidir quién gana los conflictos que tenemos en las agrupaciones, yo puedo resolverlos", espetó.Carta a los militantes

Con la vista puesta en las primarias del domingo, los dos candidatos ya enviaron sendas cartas a los más de 3.500 militantes socialistas en la provincia. En ellas, Formoso y Rosón coinciden en el objetivo: convertir el PSOE en la alternativa de gobierno al PP. Y también en la forma de lograrlo, a través de la unidad y el reencuentro con la ciudadanía. Pero los dos rivales en esta carrera difieren en el análisis de la situación actual del partido y los equilibrios de poder. El presidente de la Diputación de A Coruña llama a "unir y activar todo el potencial" del PSOE en la provincia de cara a las elecciones municipales de 2019. Reforzando al partido, asegura, se logrará que el PSdeG "vuelva a ser lo que siempre fue: la gran referencia de la izquierda, también en nuestros municipios", recoge Formoso en la misiva. Al mismo tiempo, detalla su trayectoria en el Concello y en la Diputación como un plus para ponerse al frente de la dirección provincial.

Poder orgánico

Por el contrario, Rosón cuestiona que Formoso quiera ser secretario xeral del PSdeG coruñés, cargo que tendría que compatilibilizar con la Alcaldía y la institución provincial. Y lamenta que cuando en el partido se busca "el poder orgánico", se olvidan los valores que defiende el PSOE, como la transparencia, la responsabilidad o la igualdad. La exconcejal apuesta por los equilibrios de poder. "La concentración de poder no es socialismo; eso nos divide", recoge en la misiva.