Unidad. Es la palabra más repetida durante los últimos años en el PSdeG aunque las diferencias entre las distintas familias socialistas han impedido alcanzarla y han instalado el partido en una batalla interna permanente. Conseguir la ansiada unidad pasa por superar las "luchas orgánicas", integrar las distintas sensibilidades y "trabajar desde la generosidad y el compromiso" para recuperar la confianza del electorado en la próxima cita con las urnas: las municipales del próximo año.

Con esa llamada a la unidad de los socialistas, tal y como también habían hecho sus predecesores en el cargo aunque sin lograr recomponer el partido y cerrar la crisis interna, el alcalde de As Pontes y presidente de la Diputación, Valentín González Formoso, se hizo ayer con las riendas del PSOE en A Coruña, una provincia que junto con las de Pontevedra y Ourense quedaron fuera del control del líder autonómico, Gonzalo Caballero, al no poder colocar al frente de las direcciones a sus candidatos. Pero Formoso, que había asegurado en una entrevista a este periódico que su equipo no sería "contrapoder" de Caballero aunque tampoco unos "súbditos contrapodersúbditos que digan amén a todo", se ha propuesto formar una ejecutiva de integración, en la que también estará representado el sector de su rival en el proceso de primarias, con la propia Mercedes Rosón al frente de la Secretaría de Cultura.

La dirección del PSOE coruñés, aprobada ayer con el 86% de los votos, estará formada por un total de 47 miembros -cuatro de ellos de la candidatura rival-. Es la más amplia de la historia de los socialistas, contará con cuatro vicesecretarías. Son casi 20 integrantes más que el equipo del exlíder de los socialistas coruñeses, Julio Sacristán, y cuatro más que los elegidos para la ejecutiva del PSOE de Pontevedra, aunque en este último proceso sin integración de la candidatura perdedora.

Los elegidos para el núcleo duro de la dirección provincial de los socialistas de A Coruña son los cargos de máxima confianza que ya sonaban al principio del proceso, algunos ya avanzados por este periódico el mes pasado.

Tras años en un segundo plano, el exdiputado autonómico José Manuel Lage Tuñas salta de nuevo a la arena política como secretario de Organización. Lage, que había recabado apoyos para Gonzalo Caballero en las primarias autonómicas y que en el proceso provincial optó por sumarse al proyecto de Formoso, se lanzó en 2012 a la carrera por el liderazgo del PSOE coruñés frente al entonces alcalde de As Pontes y al que resultó vencedor, el exministro Francisco Caamaño.Alcaldes

Como presidente del PSOE provincial ha sido elegido el alcalde de Dumbría, José Manuel Pequeño Castro. También tendrán un papel destacado el alcalde de Pontedeume, Bernardo Fernández, que será vicesecretario xeral y portavoz; así como sus homólogos en Oroso, Manuel Mirás (Secretaría de Política Municipal) -quien retiró el último minuto su precandidatura a a la Secretaría Xeral del PSOE coruñés para dar su apoyo a Formoso- y la alcaldesa de Bergondo, Alejandra Pérez (Vicesecretaría de Políticas Sociais).

En la nueva dirección también están el alcalde de Cariño, José Miguel Alonso Pumar, como vicesecretario de Coordinación Institucional- y el portavoz municipal de Mazaricos, Javier González Trillo, (Secretaría de Emprendemento), después de que ambos renunciasen a competir en el proceso provincial para integrarse en el proyecto del presidente de la Diputación. Y en la Vicesecrataría de Economía e Emprego, estará la diputada y exconcejal en Cerceda Begoña Rodríguez Rumbo.

Integración

De la candidatura rival, además de la propia Rosón, Formoso ha integrado en su ejecutiva al profesor coruñés Lois Fermín (Ciencia e Innovación), al secretario de Organización del PSOE Culleredo, Juan Manuel Carreira (Relacións Laborais) y al concejal ferrolano Germán Costoya (Turismo).

En la nueva ejecutiva también estarán la exsubdelegada del Gobierno en A Coruña Obdulia Taboadela (Estudos e Programas); el alcalde de Culleredo, José Ramón Rioboó (Gobernanza Local); el regidor de A Capela, Manuel Meizoso (Medio Ambiente); el senador ferrolano Ángel Mato (Industria) y la edil coruñesa Pilar Neira (Política e Deportes).Clausura

Antes de cerrar el congreso, al que asistió Gonzalo Caballero, Formoso llamó a dejar atrás las "luchas orgánicas" para trabajar "desde la unidad, la generosidad y el compromiso" y así "recibir la confianza mayoritaria de la sociedad en las municipales de 2019".

"El PSOE vuelve a ocupar el papel central de la izquierda", proclamó en su intervención Caballero, al tiempo de que advirtió de que "el socialismo es más necesario que nunca".

A su rival en el proceso, ahora ya en su nuevo equipo, Formoso la emplazó a "trabajar unidos" para volver a hacer del PSOE "la gran referencia de la izquierda". "No hay dos sin tres. Cambiamos este país a nivel estatal y a nivel gallego; y volveremos a hacerlo", concluyó el líder provincial en la clausura.