La "delicada situación" financiera del Concello ourensano de Os Blancos, con una deuda de 3,2 millones, llevó a su alcalde, José Manuel Castro (PP), a solicitar la intervención por parte de la Diputación de algunos servicios básicos. El Gobierno autonómico, en su reunión semanal de ayer, autorizó la intervención.

El vicepresidente gallego, Alfonso Rueda, explicó que la atención a varios servicios básicos municipales por parte de la institución provincial tendrá una vigencia inicial de dos años, "sin perjuicio de que, transcurrido este tiempo, se pueda prorrogar esta intervención inicial", si persisten las dificultades financieras.

Rueda agradeció a la Diputación, que dirige el también popular Manuel Baltar, que ejerza sus competencias y cumpla con la obligación de garantizar los servicios a un pequeño concellos con las características de Os Blancos, que se encontraba en una situación financiera difícil, por una vía que ha destacado como "la intervención directa".

Os Blancos activó el pasado mes de diciembre los trámites para traspasar a la Diputación los servicios de abastecimiento, saneamiento y el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) con el objetivo de acceder a un crédito del Instituto de Crédito Oficial (ICO) que le permitirá subsanar la deuda de 1,7 millones de euros que mantiene con la Seguridad Social y la Agencia Tributaria.