Solo en lo que va de año tres peatones fallecieron en carreteras de la provincia de A Coruña, la mitad que en todo 2017. Medio centenar de concellos están marcados en rojo en los planes de control de la Agrupación de la Guardia Civil de Tráfico en Galicia por el elevado número de atropellos en su red viaria. Carballo es uno de los que figura en ese mapa de riesgo. Por ello, agentes del Sector de Tráfico en A Coruña establecieron ayer un dispositivo de control sobre el uso de prendas reflectantes en la carretera DP-1914 (Carballo-Portomouro), en el lugar de Rus. Solo en esta vía durante el año 2016 se produjeron dos atropellos mortales.

DISPOSITIVO EN CARBALLO

Durante la campaña de ayer, a la que acudió la jefa provincial de Tráfico de A Coruña y coordinadora de los centros territoriales en Galicia, Victoria Gómez Dobarro, los agentes repartieron chalecos reflectantes entre los viandantes y les explicaron la importancia de su uso para que puedan ser vistos por los conductores, especialmente cuando empieza a anochecer y en condiciones que disminuye la visibilidad.

El capitán Pablo Lorenzo Formigo, jefe de la Guardia Civil de Tráfico en A Coruña, advierte de la vulnerabilidad de la población de avanzada edad y de la necesidad de concienciarles sobre el uso de chalecos o brazaletes reflectantes. "A veces la iluminación de ciertas zonas no es lo suficiente, unido a la falta de prendas reflectantes", lamenta en alusión al riesgo que acarrea la combinación de ambos factores.

Los peatones están obligados a usar prendas reflectantes cuando transitan por la calzada o el arcén fuera de poblado, entre el ocaso y la salida de sol. No utilizar estas prendas, que hacen visible el viandante hasta 150 metros de distancia, acarrea una multa de 80 euros. La misma sanción que supone a aquellos que no cruzan la calzada por un paso de peatones cuando lo hay o si cruzan fuera de un paso sin haberse cerciorado de que pueden hacerlo sin riesgo ni entorpecimiento.