Después de varias semanas, entre ellas la Semana Santa, marcadas por los temporales y las intensas lluviasSemana Santatemporales , esta primavera en la que los paraguas y las botas siguen ocupando la primera línea del armario mostrará hoy su mejor cara con una jornada sin precipitaciones y con nubes e incluso algún rayo de sol. Pero será solo un espejismo y esta minitregua terminará ya mañana con la entrada de una nueva borrasca, que servirá de anticipo a otra semana de inestabilidad y chubascos.

El fuerte oleaje obligó ayer a que buena parte de la flota de las provincias de A Coruña y Pontevedra quedase amarrada en el puerto. La alerta pasará hoy de nivel naranja a amarillo en el litoral pero se esperan olas de hasta cinco metros en el noroeste y el oeste de A Coruña y en las Rías Baixas. Pero la protagonista de ayer, sobre todo por la mañana, fue un día más la lluvia. El valor más elevado se contabilizo en Pedrafita do Cebreiro (Lugo), con 39,5 litros por metro cuadrado. Destacan también los concellos pontevedreses de Cotobade y Fornelo de Montes con más de 32 litros. En Avión (Ourense) y Abadín (Lugo), el agua recogida superó los 30 litros por metro cuadrado.

Pero dominar el paraguas fue misión complicada en varias localidades como el concello ourensano de Carballeda de Valdeorras y el lucense de Viveiro con 107 y 105 kilómetros por hora respectivamente. También se superaron los 100 km/h en zonas del litoral como el ayuntamiento coruñés de Cedeira, donde el viento sopló a 102 km/h.

La combinación de precipitaciones y viento causó varias incidencias este martes en Galicia, sobre todo relacionadas con la caída de postes de la luz y árboles, así como inundaciones por el desbordamiento de alcantarillas o desprendimientos de piedras y tierra en las carreteras.

Mañana una nueva borrasca situada en el noroeste traerá un frente frío que ya a primera hora de la mañana dejará precipitaciones en las áreas de costa que se extenderán a toda la comunidad a medida que avance el día.

El fin de semana continuará la inestabilidad aunque se concentrará por la tarde debido a la presencia de aire frío en capas altas de la atmósfera. De esta forma, el sábado se esperan cielos nublados con chubascos tormentosos. Las temperaturas mínimas bajarán de los 10 a los seis grados de media, mientras que las máximas se moverán entre los 15 y los 18 grados. Y desde el domingo la combinación entre el aire frío y los vientos del noroeste será la responsable de otra semana de inestabilidad, con alta probabilidad de lluvias.