El PSdeG recuperó ayer la Alcaldía de Sobrado dos Monxes en la que fue la segunda moción de censura en este concello de la provincia de A Coruña, de apenas 2.000 habitantes. En un pleno bronco, cuya celebración tuvo que garantizar la Guardia Civil, Lisardo Santos, con el apoyo de un edil independiente que había concurrido en las listas del PP, Juan Vicente Aller, se hizo de nuevo con el bastón de mando que en marzo del año pasado le había arrebatado la independiente María Jesús García (Todos por Sobrado), en otra moción apoyada entonces por los popularesMaría Jesús García Todos por Sobrado. La dirección provincial del PP avanzó ayer que recabará toda la información sobre la postura de sus dos concejales en Sobrado para así llevar a la Justicia la legalidad de las votaciones, tal y como hará también la ya exalcaldesa.

La exregidora intentó suspender la sesión con el argumento de que la secretaria municipal estaba de vacaciones y no podía ejercer sus funciones. Sin embargo, fue la propia Alcaldía la que emitió un decreto por el que obligó a la funcionaria a tomar el descanso hasta el jueves de la próxima semanaAlcaldía , fecha de su jubilación, pero que la habilitada nacional rechazó y quiso continuar en su puesto de trabajo. Al regreso el lunes al Concello, la secretaria se encontró con su despacho cerrado y la cerradura cambiada, por lo que interpuso una denuncia ante la Guardia Civil.

Ante el intento fallido del equipo de gobierno local de frenar la moción promovida por Lisardo Santos, avalada por la dirección gallega del PSdeG pero deslegitimada por el PP gallego, Todos por Sobrado recurrirá por la vía contencioso-adminitrativa la resolución del pleno para declarar nula la moción ya que entiende que no se podría haber celebrado hasta el envío de un nuevo secretario municipal por parte de la Dirección Xeral de Administración Local de la Xunta.

Antes de que comenzase la sesión, María Jesús García alegó a los miembros de la corporación de la posible comisión de un delito de prevaricación y/o desobediencia al proceder al debate de la moción con la secretaria de vacaciones, dictadas por decreto. Incluso la ya exregidora tachaba de "fraude de ley" la consideración como no adscrito de Juan Vicente Aller, que si hubiese estado en el grupo del PP tendría una consideración diferente a efectos de la moción, pero advertía de que para "burlar las disposiciones legales" no se adscribió al grupo y así logró "derechos superiores" al resto de los populares.

Desde el PP, desautorizan la iniciativa que firmó el edil que fue en su lista, pero que ya no se incorporó al grupo municipal popular después de que dimitiese su portavoz, lo que propició la moción de censura.

La moción votada ayer se convierte en la undécima de este mandato municipal en Galicia y la octava en la provincia de A Coruña: dos en Sobrado dos Monxes, Boimorto, Noia, Santa Comba, Mugardos, Coristanco y Fene. Las otras tres se registraron en la provincia de Pontevedra: Oia, Pontecesures y Tui.

En las elecciones municipales de 2015, en Sobrado, los socialistas se hicieron con cuatro concejales, el PP con tres y Todo por Sobrado, dos. En marzo del año pasado, una moción de censura promovida por los independientes con el apoyo de los populares arrebató la Alcaldía al PSdeG. Ayer el bastón de mando volvió a manos socialistas.

La moción de censura se desarrolló en medio de una gran "tensión" y con un intento de "boicot" por parte de los ediles que hasta ahora estaban en el equipo de gobierno, como así lo describió el ya alcalde, Lisardo Santos. La Guardia Civil tuvo, además, que garantizar la celebración de la moción de censura y llegó a desalojar a alguno de los asistentes al pleno.

El recién proclamado alcalde de Sobrado dos Monxes dijo dar por "zanjada" la tensión que se generó entre el público, pero advirtió de que en cuanto a los concejales "ya se verá" si "hay que abrir alguna medida". Arropado por la alcaldesa de Bergondo y otros dirigentes socialistas de la provincia, Santos asumió el bastón de mando entre "insultos" y "amenazas", según lamentó.

Desde el PP en la provincia cuestionaron ayer la "doble vara de medir" del PSdeG, al que acusan de "actuar de una manera en Coristanco", donde expulsaron de su formación al actual alcalde, Abraham Gerpe. Sin embargo, en Sobrado, según advierten los populares, "aceptaron gobernar en estas condiciones". "Al PSOE le vale todo", cuestionan desde el PP, que lamentan la "falta de criterio" demostrada, en referencia al secretario xeral del PSdeG, Gonzalo Caballero, y al líder de los socialistas en la provincia de A Coruña, Valentín González Formoso.