El diputado de En Marea y número dos de Podemos en Galicia, Juan Merlo, anunció ayer su dimisión de ambas responsabilidades tras reconocer que no había completado los estudios de ingeniería, a pesar de que en sus currículos tanto institucional como orgánico se le atribuía la categoría de ingeniero. "La coherencia me obliga a dar este paso", alegó.

El caso supone un mazazo para la fuerza que lidera la oposición, ya sumida en una crisis por la gestión del altercado de Paula Quinteiro con la Policía, y para Podemos, al afectar a la mano derecha de su líder en Galicia, Carmen Santos, que ayer se encontraba en Madrid.

Al hilo de la revelación de las irregularidades en la obtención de un máster por parte de Cristina Cifuentes, presidenta de Madrid y del PP autonómico, se ha puesto la lupa sobre los currículos de los políticos. El diario ABC reveló ayer que Merlo no había finalizado los estudios de ingeniería, aunque figuraba como ingeniero en sus biografías en las webs del Parlamento y de Podemos. En esta última se definía como "ingeniero industrial en Automática y Electrónica".

Merlo reconoció su "error" y el "bochorno" por una situación que se mantuvo con su "connivencia". Alegó que no finalizó sus estudios por no poder compaginarlos con trabajar en empresas de ingeniería, donde, aseguró, ejerció de gerente y no firmó proyectos como ingeniero. Descartó dimitir y alegó que, sin el caso Cifuentes en la escena pública, su situación sería entendible. Menos de dos horas después, anunció su renuncia para ser coherente con "la forma ética de hacer las cosas". "No vine a la política nunca para sedimentar en ella ni para vivir de ella, vine para cambiar las cuestiones", alegó. "Es lo justo y los demás partidos políticos no tienen el talante de nuestro partido y para mí es un orgullo poder hacer defensa de lo que me trajo aquí", argumentó, si bien insistió que su caso no es de "una gravedad tan extrema" como los que afectan al PP.

"No hubo ninguna institución pública a la que mancillar para que cambiase notas o ponerle un máster", censuró sobre Cifuentes, antes de negar que se atribuyese "un máster por la Universidad de Harvard aunque fuese de cuatro días", en referencia al también popular Pablo Casado.

La dirección estatal de Podemos le enseñó la puerta de salida a primera hora tras conocerse la mentira de su currículo. "Somos ejemplares porque cuando cometemos un error lo reconocemos", declaró la número dos del partido, Irene Montero, una vez Merlo anunció su adiós. "Empezó la carrera y se formó, pero no pudo terminarla porque tenía que ayudar a la familia y tuvo que abandonar los estudios. Pero si aparecían los estudios y no lo hizo, ha tenido que hacer lo que era evidente. Lo ha hecho rápido y con un sentimiento muy humano diciendo que no debería haberlo hecho", explicó.

El caso Cifuentes, una presunta falsificación de documentos oficiales para otorgarle un máster sin cumplir los requisitos, ha puesto en un brete al PP, pero la izquierda también se enfrenta a problemas.

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, consideró alguno de estos "peor" que el de su compañera, como el del número dos del PSOE madrileño, José Manuel Franco, que se atribuyó una Licenciatura en Matemáticas sin poseerla, por lo que su jefe de filas, Ángel Gabilondo, sopesa que no defienda la moción de censura en Madrid. Sin embargo, el Ejecutivo sufrió en 2015 un caso similar, al atribuir a Tomás Burgos la condición de "médico", pese a no haberse licenciado. Sigue siendo secretario de Estado de la Seguridad Social.

Merlo dimitirá en plena crisis de En Marea por el caso Quinteiro, pero diferenció los casos: "Se le están atribuyendo e imputando faltas y delitos diciendo que estaba en un grupo de personas que participaron en un acto vandálico, cuestión no demostrada".

El siguiente en la lista de En Marea por Pontevedra es Xoán Hermida, que aseguró que no asumiría el cargo después de conocerse también un incidente con la Policía. De cumplirlo, relevaría a Merlo Julia Torregrosa, también de Podemos.