El rural se ha hecho oír el año pasado por la Valedora. Las reclamaciones de este ámbito supusieron en 2017 el 12% del total, cuando un año antes solo representaban el 0,1%. Este incremento, que la Valedora tachó de "exponencial", lo relacionó con el hecho de que la institución se haya volcado con este ámbito y haya apostado por la atención a sus problemáticas propias mediante una campaña "proactiva" y de "aproximación" a los municipios más pequeños de Galicia.

En esos encuentros, "a pie de calle", detectó necesidades "específicas" y se sintió "identificada" con sus problemas, como por ejemplo el denominado "catastrazo" o la ola de incendios. También menciona el alto comisionado las relativas a la propiedad vecinal de los montes, a su limpieza, al transporte público por carretera, al personal en puntos de atención continuada (sobre todo "escasez de pediatras" e incluso a la "brecha" que existe en ciertos puntos donde la población carece de teléfono fijo, no tiene cobertura de móvil o de internet y con suministro eléctrico deficiente afectado por cortes frecuentes.

Una de las quejas de oficio de la Valedora vinculadas al rural tuvo que ver con los incendios. Tras visitar Carballeda de Avia, Otero obtuvo el compromiso de la Xunta de agilizar la tramitación de las compensaciones para facilitar los procedimientos abiertos.