La Asociación por la Recuperación de los Desaparecidos en el Franquismo (ARDF) anunció el mes pasado que para el próximo 2 de julio está prevista la exhumación de los restos de los cadáveres enterrados en la fosa común del cementerio de Vilarraso, en el concello coruñés de Aranga. Se trata del mayor de los enterramientos del franquismo en GaliciaGalicia, donde los investigadores sospechan que hay por lo menos una treintena de represaliados. Pero que este proyecto se pueda llevar a cabo dependerá de si la ARDF consigue como mínimo de 7.665 euros a través de la campaña de crowfunding que ha lanzado a través de la Fundación Gotea para la exhumación el 2 de julio de esta y otras tres fosas en A Coruña y Lugo que, según sus estimaciones podrían sumar 65 víctimas, entre ellos "tres maquis muy conocidos por su resistencia, un alcalde socialista o una maestra republicana".

Además de la exhumación en Vilarraso, la recaudación de fondos es necesaria también para otras dos fosas en el cementerio de San Vicente de Fervenzas, también en el concello de Aranga, donde la asociación estima que haya soterrados en el atrio del camposanto ocho cuerpos junto a otra en el ayuntamiento lucense de Foz. Pero si no se llega al primer objetivo de los 7.665 euros tendría que cancelarse la iniciativa y devolverle el dinero a los donantes. Por ahora se han recaudado 140 euros.

El proyecto de exhumación de las cuatro fosas comunes surgió en 2011, cuando la organización inició varias investigaciones documentales por distintos puntos de la geografía gallega como A Coruña, Lugo o Tui, siguiendo peticiones ciudadanas.

La iniciativa se demoró, sin embargo, hasta este año porque los permisos se concedieron hace tan solo un mes. "Es un acto de justicia devolver la identidad robada a estas personas y poder entregar sus restos mortales a sus familiares, algunos muy mayores", destacan desde la entidad. La ARDF ha localizado, de hecho, familiares que residen en Canarias o Argentina, pero también otros en zonas próximas de las cuatro fosas comunes.