"Lo importante en él será el interior, no el exterior". La frase la utilizó ayer el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, al presentar el nuevo proyecto para un edificio universitario que reciclará la estructura inicial que quedó, después de que el plan inicial fuera suspendido: el Teatro de la Ópera del Gaiás. De ese modo, advierte ya de que la espectacular arquitectura de Peter Eisenman no será la protagonista, aunque diversas fuentes señalan que la obra buscará ser "coherente" con el conjunto.

De ese modo, la Cidade da Cultura seguirá engordando como sede de empleados públicos, una de las soluciones por las que optó el Ejecutivo autonómico para aprovechar la infraestructura diseñada por el arquitecto neoyorquino. En la actualidad, según la Fundación Cidade da Cultura, casi 600 personas (la mayoría de la Amtega, pero también de Agadic, el personal de bibliotecas de Cultura, la Fundación que gestiona el Gaiás o los 250 emprendedores del Centro de Emprendemento, entre otras) desarrollan su trabajo en unas instalaciones en las que se invirtieron en torno a 300 millones de euros hasta que el Gobierno de Feijóo decidió suspender dos de los inmuebles: el Teatro de la Ópera y el de Nuevas Tecnologías. Una parte de los espacios que dejaron se ocuparon con jardines y ahora la zona construida del primero pondrá los cimientos del nuevo proyecto.

En este caso, explicó el presidente de la Xunta, el edificio Fontán, que es como se denominarán las nuevas instalaciones en honor al autor del primer mapa topográfico de Galicia, servirá para alojar el nuevo Consorcio Interuniversitario de Galicia -que promoverá la cooperación en todos los ámbitos, incluso con la posibilidad de realizar compras conjuntas, entre las universidades gallegas-, además de la Axencia para a Calidade do Sistema Universitario de Galicia y el futuro Centro Europeo de Investigación en Paisaxes Culturais, que se centrará en el Camino de Santiago. Se trata del primer centro de investigación en ciencias sociales del Sistema Universitario de Galicia y el único de España en estas áreas de conocimiento, destacó Feijóo.

El jefe del Ejecutivo autonómico incidió en que erigir el nuevo edificio sobre la estructura del que iba a ser el Teatro de la Ópera es la "más económica de todas las alternativas disponibles". Desgranó cómo el poder "aprovechar" el esqueleto ya construido supondrá 17 millones de euros, mientras que hacerlo en cualquier otro lugar requeriría unos 30 millones, 13 más. Por otro lado, esos 17 millones son, según dijo Feijóo, 7 millones más de lo que costó la estructura del teatro y de lo que se necesitaría para derruirla. En esa línea, incidió en que en el Gaiás "ya" existe "un ecosistema de trabajo, por lo que se podrán compartir gastos en seguridad, calefacción e infraestructuras informáticas". Así, apeló al "sentidiño económico" para justificar una decisión que ve "responsable para las arcas públicas, respetuosa con la inversión que los gallegos ya hicimos en este espacio y beneficiosa para nuestras universidades, porque está al lado de la principal arteria de Galicia, la AP-9". A las tres instituciones de enseñanza superior también aludió para aplaudir que unan fuerzas y demuestren que "el minifundismo académico no cabe en las universidades gallegas del siglo XXI".