La refoma del impuesto de plusvalía es uno de los deberes pendientes que tendrá que asumir el Gobierno de Pedro Sánchez. Miles de contribuyentes en España, entre ellos más de 18.000 en Galicia, pagaron el gravamen en sus respectivos ayuntamientos pese a vender sus propiedades con pérdidas. Un año después de que el Tribunal Constitucional anulase el tributo en operaciones sin ganancia alguna, el PP inició su trámite de reforma en el Congreso para regular la devolución del tributo a los afectados, algo que solo se prevé de forma automática para las ventas, herencias o donaciones posteriores al 15 de junio de 2017, fecha en la que publicó en el BOE la sentencia del Alto Tribunal. La gran incógnita es quién va a afrontar el reintegro, si los concellos o la Administración central.
En Marea urge al Gobierno central que acelere la reforma del impuesto de plusvalía para que se devuelva "lo injustamente cobrado a más de 18.000 gallegos", al tiempo que reclamó que el Estado asuma el "coste" de esta "devolución de oficio" que gestionarán los ayuntamientos.
El partido instrumental ha registrado una batería de iniciativas para reclamar "la devolución y compensación de los daños provocados" a aquellos ciudadanos que pagaron el impuesto de plusvalía "a pesar de la situación de emergencia, por dación en pago o pérdida de viviendas similares".
¿Qué ocurrirá con los contribuyentes que ya pagaron pese a haber vendido a pérdidas o haber heredado un inmueble que se devaluó desde que fue adquirido por el difunto? El proyecto de reforma que elevó el PP al Congreso precisa que las modificaciones tendrán efecto desde el 15 de junio de 2017. En consecuencia, serán muchos más los que quedarán excluidos de esta "devolución automática" por ventas a pérdidas, aunque -como hasta ahora- tendrán la opción de ir a los tribunales para reclamarla, salvo que haya un vuelco en la reforma.
