Los ayuntamientos gallegos y las diputaciones verán incrementados sus presupuestos este año en 50 millones de euros con respecto a los manejados en 2017. Procederán del concepto de Participación en los Ingresos del Estado (PIE), cuya revisión ha sido posible tras el acuerdo para tramitar los Presupuestos Generales del Estado en el Congreso. Y el nuevo presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha asegurado que los respetará y aunque el PP ha anunciado que los enmendará en el Senado para castigar al PNV, en principio esta contribución a las arcas municipales no debiera variar.

Cada mes, el Gobierno central transfiere una determinada cantidad a las administraciones locales en función de su tamaño. Es la parte que les corresponde por los ingresos vía impuestos que acaban en las arcas estatales. Este año arrancó con una cuantía de 1.102,9 millones de euros a repartir entre ayuntamientos y corporaciones provinciales de Galicia, de los que 528,6 eran para las diputaciones y el resto, más de 574 millones, para los concellos. Era la misma cantidad que en 2017, dado que los presupuestos se habían prorrogado en enero por falta de mayoría parlamentaria.

El Gobierno, entonces del PP, se puso no obstante a la elaboración de las cuentas para 2018, que finalmente se aprobaron en su fase inicial contando con los votos del PNV. El triunfo de la moción de censura la pasada semana puede dar un vuelco a los presupuestos, pero Pedro Sánchez se ha comprometido a respetarlos. Las nuevas aportaciones del Estado a través de la PIE suponen un incremento adicional para las diputaciones y los ayuntamientos gallegos del 4,65% con respecto a las cuentas del ejercicio pasado, al pasar de 1.102,9 a 1.152,8 millones de euros. Prácticamente, 50 millones más.

Del total del incremento, casi la mitad irá para las diputaciones, que sumarán 23,8 millones a sus presupuestos iniciales para alcanzar finalmente un total de 528. El resto se distribuirá entre los concellos. Casi 10,5 millones de euros se van para las ciudades de A Coruña, Vigo, Pontevedra, Ourense, Lugo y Santiago, por ser todas ellas ayuntamientos de más de 75.000 habitantes. En todos la subida será homogénea, en el entorno del 4,65% de incremento global para la comunidad autónoma.

Para el resto de los municipios, la aportación adicional no será lineal. Las variaciones serán importantes, pues se tienen que calcular de forma independiente para cada uno, teniendo en cuenta el último padrón de población, el esfuerzo fiscal que realizan y la capacidad tributaria.

Estos concellos tenían asignado inicialmente 355,4 millones, pero al final dispondrán de casi 340. Serán 15,6 millones más con respecto a la previsión de principios de años, según los cálculos de la Federación Galega de Municipios e Provincias (Fegamp). En todo caso, para proceder a esta nueva asignación, los Presupuestos del Estado tienen que ser aprobados definitivamente.