- ¿ Rajoy quiere canjearlo por Marta Rovira o Ana Gabriel? [La entrevista se realizó antes de la moción de censura]

-¿Sabe lo que se encuentra detrás de esta pregunta? Un procedimiento de extradición en el que el primer paso lo tiene el Gobierno, el consejo de ministros, que tiene la opción de callarse o rechazarla. También puede negociar que los demás países involucrados en la extradición puedan callarse. Por supuesto la opción que defiendo es que se trata de una oportunidad importante, no solo para mi caso, que presenta alguna característica interesante para los demás... Hablamos aquí de perseguir a elementos de verdad, a elementos que han permitido varias investigaciones, varios pactos del banco que está detrás. Y cómo el banco en el origen de esta orden de extradición es el mismo banco que ha pactado miles de millones en varios países para no ir a juicio y que es conocido por todos los temas de blanqueo en la historia. Así que a nivel judicial, estamos en una situación un poco loca en la cual el banco que pactó no ir a juicio me persigue a través de una orden de extradición por lo que he hecho: entregar elementos y permitir entender lo que pasaba al ámbito judicial, incluido el español.

- ¿Pero podría existir un pacto para intercambiarlo?

-El pacto podría ser: ellos se callan para que al final la justicia alemana se calle. Aunque en Alemania ya se calló, por lo que no necesitarían esto más ahora. Pero cuando el ministro de Asuntos Exteriores dijo en Suiza al ministro suizo que no se iban a entrometer o interferir con la justicia fue un modo de decir: "Olvidamos, hacemos que la gente olvide que a nivel político se puede rechazar una orden". No es un procedimiento totalmente judicial. Anteriormente era un procedimiento político. Después puede devenir en puramente jurídico. Anteriormente lo que se habla es el ámbito político. No se tiene que rechazar para quitarse la responsabilidad de no tomar una decisión, por ejemplo. Entonces es aquí en este ámbito restringido de la palabra política donde se puede hablar de un intercambio de cromos.

- ¿Tiene constancia concreta de que se negocie este cambio de cromos?

-Creo que es consistente. Y estoy muy atento cada vez que hablo para que todo sea también consistente. Aunque entiendo que puede ser complicado y liado. Es muy difícil para que la gente pueda entrar en detalles.

- ¿ Su condición de testigo protegido y que la Audiencia Nacional ya se pronunciara en 2013 sobre su situación le da tranquilidad?

-Yo siempre me levanto tranquilo y me voy a dormir tranquilo con lo que tengo que hacer. Y sé, lo tengo muy claro, que el único ámbito en el cual existo es en el que puedo hacer algo. No tengo que hacer nada, ni puedo. A nivel judicial, sin conocer bien el derecho, sabes que no se juzga a una persona dos veces por los mismos hechos. No tengo elementos para poder hacer un análisis más allá de lo que puede pasar a nivel judicial: soy un testigo protegido relacionado con el banco en el origen de la petición de orden de extradición en un asunto que se ha investigado de varios modos y en varios países. Todo esto es una locura total. Pero no presumo que el mundo no está loco.

- ¿Le intranquiliza más que las decisiones políticas se impongan a las judiciales?

-No necesito ser tranquilizado, la verdad. ¿Puede existir intromisión de la política en la justicia? Bueno, los hombres pueden tener miedo y dejarse influenciar por poco que exista una mala ética política para influir sobre los asuntos judiciales. Hemos visto en las últimas manifestaciones de los magistrados que no tengo por qué preocuparme por una injerencia de la política en los asuntos judiciales. No creo. De verdad no tengo otras referencias que las personales. Pero con estas personas he podido mirar, comparar con otros ámbitos judiciales de otros países. Y sumando lo que he visto y he aprendido es en el ámbito político donde estoy más tranquilo... ¿Ok? Donde tengo más probabilidad de que nada raro puede pasar. Hubo una situación mucho más difícil anteriormente, pero esta vez parece más limpio y más sencillo.

- ¿S igue confiando en la justicia a pesar de que le detuvieran y el fiscal pidiera su ingreso en prisión?

-La primera vez [que lo detuvieron] estuve en la cárcel cinco meses, a petición del fiscal y el juez. Y vine aquí tras comparar lo que podría pasar en otros sitios, por lo que busqué la judicialización de mi situación en España. No está en mi papel, en mi retiro buscado, sustraerme a la justicia que veo más adecuada.

- ¿Cómo se explica ese cambio de la Fiscalía?

-No hablamos de la Fiscalía. Hablamos de un fiscal que no conocía el caso, según decía él mismo. Y que se hizo de un modo precipitado todo esto.

- Parece una decisión preventiva, la petición de prisión contra usted...

-Sí, porque no conocía el asunto. Aunque, ojo, la vez anterior yo me quedé cinco meses en la cárcel. Es decir, se tiene que entender cómo funciona un sistema judicial internacional en el caso de la extradición que es algo muy particular.

- ¿A día de hoy sigue activa su colaboración con la justicia?

-Soy testigo protegido y estoy colaborando con varias justicias ahora mismo.

- ¿ Aún existen casos abiertos en los que pueda aportar información?

-Estoy en muchos casos abiertos. En España siguen las investigaciones. Se publicó algo sobre investigaciones de los intermediarios financieros. Es un ejemplo más. O un cambio en un tribunal que en una investigación de 118 millones iba a prescribir... Siguen siendo muchas investigaciones.

- ¿Cuánto dinero habrá permitido recuperar?

-Hablando con la gente de Hacienda creo que el mejor efecto que se tiene que entender es el miedo. Mi colaboración y muchas más permitió un cambio en la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos), un intercambio de información. Todo esto entra en la misma línea de lucha contra la evasión y el fraude fiscal. A nivel del caso HSBC, cuando tienes un hombre tienes los relacionados con otra banca o la misma, y eso hace que se calcule y se multiplique... Son casos que representan miles de millones cada vez.

- ¿Algún evasor cazado le ha enviado algún mensaje amenazante?

-Yo tengo elementos de seguridad, que son los que analizan los riesgos. Y es evidente que existe un riesgo, el riesgo se contempla, se maneja. Como mencioné [en una conferencia] no llevé teléfono durante años, para no facilitar que unos tontos o locos tuvieran la tentación de escuchar con quién me relacionó y a quién podría molestar?

- Pero ahora sí que tiene...

-Lo he tenido por el tiempo que tenía domiciliación fija?

- Al día siguiente de contar usted que no tenía teléfono lo vi solo, hablando con un móvil...

-Claro, lo tenía porque tenía domiciliación fija y porque tengo más? Pero se ha tenido que reforzar la presencia policial...

- Como el día anterior acababa de admitir que no tenía móvil?

-Muchas veces utilizo teléfonos de amigos o colaboradores. Y eso es verdad que no es mi teléfono. Pero he tenido por un rato un teléfono que utilicé, pero sigo sin tener mi propio teléfono.

- ¿De qué vive un testigo protegido?

-Yo de asesorías. Pero todo lo que colaboro con la Universidad o las administraciones no lo cobro. Cobro con lo privado. He trabajado varios años en un instituto de investigación de proyectos europeos sobre detección de fraude. Era un contrato privado para trabajar y encargarme de los algoritmos de inteligencia artificial en detección del fraude.

- ¿La condición de testigo protegido no supone un sueldo?

-No lo he pedido. Podía haberlo hecho pero no he solicitado ninguna remuneración. Me molesta cobrar por mi trabajo. La administración no tiene dinero de verdad o trabajan de asesoría como los grandes copiando lo que se prepara en las universidades o es una pura mierda. Pero de verdad no pueden ser, tienen poquito interés. Lo mismo que explican como de verdad no pueden ser los que pretenden luchar contra el fraude. Cuando colaboro con unos no quiero tener problema y cuando cobro por mi trabajo no tiene que ser con dinero público.

- ¿Cómo se plantea el futuro un testigo protegido?

-Se planea con suerte. Tengo varios proyectos e intento equilibrar entre la parte privada y la parte que puede ser de control público. Pero es el desafío más grande tener un equilibrio. A nivel privado tiene siempre consecuencias: no disfruto como querría de mi familia. Pero lo vivo consciente del privilegio de poder hacer algo por los demás.

- ¿Concede estas entrevistas para combatir las fake news , como que quería vender los datos del HSBC?

-Es tirón mediático (sonríe). Eso es la práctica habitual: atacar a una persona para olvidar los hechos. Pero es mi responsabilidad que no solo se quedan sino que se aprovechan. Y el tirón mediático es la oportunidad que hemos encontrado con los varios actores que han dado y dan la cara para que no se olvide que es una batalla al fin. Ellos intentan todos los recursos sucios y nosotros no tenemos que lamentarnos.

- Aunque esa información la defendía su antigua compañera de trabajo y también el banco para el que trabajaba...

-Si yo fui condenado, ¿por qué ella no? Si lo que hicimos, lo hicimos juntos... ¿Cómo lo ha conseguido? Es terrible. Es solo un tema de trabajo. Coges los hechos, lo ves y después hablamos.