Galicia recibió ayer el verano con sol y calor y el buen tiempo seguirá en lo que queda de semana y respetará la celebración de San Juan sin que la lluvia apague las hogueras. Desde MeteoGalicia aclaran que la noche meiga del sábado vendrá marcada por la sensación de bochorno y las altas temperaturas -no bajarán de los 15 grados- y aunque no se esperan precipitaciones se pueden registrar tormentas en el interior gallego. La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) apunta además que no hay previsión de niebla ni de fuerte oleaje, ya que las olas serán de menos de dos metros. Una vez pasada la noche más larga del verano y la festividad de San Juan el domingo con temperaturas entre los 25 y los 30 grados de máxima, la próxima semana la situación será más inestable. Además de un descenso de las temperaturas, el lunes y el martes las tormentas serán las protagonistas. Será una semana anómala por la presencia de aire frío en las capas altas de la atmósfera y cálido en superficie. Pese a que haya que volver a coger el paraguas la próxima semana, el delegado de la Aemet en Galicia, Francisco Infante, anuncia un verano "bueno y normal", lo que no impide que en los próximos meses se den episodios de vientos del nordeste, tormentas y nieblas.

El verano sucederá a una primavera fría y la más lluviosa en 48 años debido al paso de temporales como Giselle, Félix o Hugo. En Galicia el trimestre pasado llovió 57 días, un 54% más de la media. Así la sequía que arrastraba la comunidad finalizó en marzo y el agua de primavera permite que los embalses gallegos se encuentren a un 78% de su capacidad.