"Los hay que quieren pilotar un Boeing 307 sin haber pilotado antes una avioneta y yo tengo muchas horas de vuelo", bromeó Soraya Sáenz de Santamaría ayer en alusión a las nuevas caras en el panorama político nacional. Y lo hizo ante militantes del PP de Vigo que se acercaron a la sede de la ciudad para escuchar las propuestas de la exvicepresidenta del Gobierno en su carrera por liderar el partido en Génova. "Me presento porque creo que puedo ganar a Pedro Sánchez y ayudar a los ayuntamientos de cara a las municipales", expresó la ex número dos de Rajoy.
Santamaría quiso dejar claro que no va a decir nada de sus contendientes para alcanzar la Presidencia del PP, como Pablo Casado o María Dolores de Cospedal. "Tenemos que ser muy generosos antes, durante y después e integrar. El día 21 estar unidos", apuntó y añadió que no va a "dar bazas" al actual presidente del Gobierno. "Mis adversarios son Sánchez, los independentistas y los populistas", zanjó.
Explicó además a los militantes que existe "una tendencia en Madrid a pensar que solo interesa lo que pasa dentro de la M-30", para añadir que hay que "abrir el abanico" y "abrir el partido", expresiones que vinculó con el buen hacer del PP en Galicia.
"La corrupción ya nos ha pasado factura, se acabó el comodín de la corrupción", sentenció Santamaría, al tiempo que animó a la militancia a pasar página con este tema y a no amedrentarse. "Al PP se le critica mucho pero no debemos comprar discursos ajenos. Yo soy de criticar poco a los compañeros. Hay mucha gente joven que tiene ganas de trabajar. Nos analizaremos y veremos en qué podemos mejorar", concluyó.
