Ni la Valedora do Pobo dimite ni el PP pedirá su cese a pesar del clamor de toda la oposición que exige su dimisión tras la sentencia judicial que acusa a Milagros Otero de "desvío de poder" y "arbitrariedad" por el nombramiento como jefa de servicio de la institución de María Puy Fraga, hermana del portavoz parlamentario del PP gallego y sobrina de Manuel Fraga.

La Alta Comisionada defendió ayer en el Parlamento que "no existe razón" para dejar el cargo porque nunca desatendió su labor como defensora de los gallegos. Niega que creara "una plaza ex novo y a medida" para la hija de quien fue su tutor, el catedrático de Derecho Francisco de Paula Puy Muñoz, y admite que, en todo caso, pudo haber "errores formales" en el procedimiento.

El PP dio por buenas sus explicaciones y limitó a "un fallo humano" los defectos en la selección del candidato. Pero además la diputada popular Paula Prado cuestionó la sentencia y señaló que "salió de la misma sala del Tribunal Superior Xustiza de Galicia (TSXG)" en la que tiene plaza en excedencia como magistrado el portavoz de En Marea, Luís Villares. "¿Casualidad?", se preguntó. "Los jueces son personas, no son infalibles y pueden equivocarse", advirtió. "Una sentencia se puede discutir", añadió.

Los populares, por lo tanto, no apoyarán el cese de la Valedora que En Marea, PSdeG y BNG plantearán en el pleno de la próxima semana. "Esperaremos a que haya sentencia firme", señaló Paula Prado.

Precisamente, la Valedora estudia presentar un recurso a la sentencia que, aunque acata, no comparte. "Cumplimos de forma escrupulosa los requisitos de la plaza e incluso posiblemente fuimos escrupulosos de más, lo que pudo dar lugar a malos entendidos", explicó ante la comisión de peticiones de la Cámara autonómica.

Milagros Otero fue poniendo sobre la mesa documentos para defenderse de la sentencia que la acusa de "desvío de poder". Por un lado, explicó que decidió abstenerse en el procedimiento de selección que se abrió para nombrar jefe de servicio de Administración y Personal en el Valedor al haber sido discípula del padre de una de las candidatas. De esa manera delegó en el adjunto al Valedor, propuesto para el cargo por el PSOE. En este aspecto volvió a incidir después al señalar que si se equivocaron "fueron muchos los errados". La diputada del PP también preguntó a los socialistas si el cese que demandan de la Valedora hay que hacerlo extensivo a toda la institución.

Por otro lado, Milagros Otero alegó que los méritos establecidos para valorar al candidato, que la sentencia señala que se diseñaron a medida de María Puy Fraga, estaban establecidos con carácter "previo" a que se iniciase el procedimiento de selección.

En su defensa, la diputada Paula Prado añadió que se trataba de un procedimiento de libre designación y no de un concurso y, por lo tanto, "la Valedora puede elegir a quien mejor le parezca". Y aludió a otra sentencia que anuló varios puestos de libre designación en el Concello de A Coruña.

La oposición coincide en que la negativa a dimitir de Milagros Otero causa "daños irreparables" a la entidad que preside. El portavoz de En Marea, Luís Villares, lamentó que la institución del Valedor do Pobo "queda manchada". Y vertió más dudas sobre el nombramiento de María Puy Fraga. El Comisionado designó un asesor externo para valorar a los candidatos. La sentencia judicial señala que se eligió para esta tarea a un catedrático de Derecho Laboral cuando se ajustaba más un catedrático de Derecho Administrativo. Y Villares explicó que esta persona fue Jesús Martínez Girón, quien fue propuesto para la Junta Electoral de Galicia por el PP con la firma de Pedro Puy. "¿Casualidad?", se preguntó Villares.

Los populares aclararon que Martínez Girón es vocal en la Junta Electoral desde 1994 y forma parte de los profesores que designa el Parlamento para este organismo a propuesta de los grupos parlamentarios. "No es representante de ninguna candidatura", advirtieron.

La socialista Patricia Vilán se sumó a la petición de cese de Milagros Otero. "Es difícil que los ciudadanos confíen en una institución en la que falla la transparencia", señaló. Pero insistió en que "lo más terrible" es el "daño irreparable" que se causa a la institución del Valedor do Pobo.

Para Montse Prado, del BNG, la sentencia del TSXG es de "tal contundencia" que "inhabilita" a Milagros Otero a seguir en el puesto. "Su situación es insostenible. Aferrándose al puesto, causa más daño al Valedor do Pobo", lamentó. En su opinión, se siguen reproduciendo "prácticas de enchufismo y caciquismo".