La directora de la Oficina de Atención a Víctimas de Renfe, Carmen Jiménez, también compareció ante la comisión, donde defendió la gestión que hizo la empresa pública "volcándose" desde el "minuto uno" en la atención a los afectados por el accidente. Además, destacó que la entonces ministra de Fomento y actual presidenta del Congreso, Ana Pastor, estuvo "muy presente" y mantuvo "contacto permanente" con la oficina para conocer el estado de las víctimas. Jiménez reseñó que desde el "minuto uno" se desplazó personal de Renfe hasta el lugar del siniestro para dar apoyo a las víctimas. "Se volcó el ferroviario, con este y con cualquier accidente", alegó.

En relación a Pastor, indicó que se mostró preocupada por hacer un seguimiento del estado y el ánimo de las víctimas, y dio instrucciones para que la oficina contara con todo lo que necesitara. "(Pastor) Ha estado muy presente, hemos hablado continuamente. Ha sido muy doloroso, hemos tenido reuniones y ha intentado ayudar en todo lo posible", recalcó ante los diputados, frente a los que indicó que Renfe se llegó a exceder en sus funciones gestionando temas relacionados con pólizas de seguros para que los afectados tuvieran la mayor cobertura posible.

Igualmente, la representante de Renfe indicó que se puso en contacto personalmente con todas las víctimas del accidente salvo con ocho, cuatro con las que fue imposible contactar y cuatro que vivían fuera.