El mosquito Aedes japonicus hallado por primera vez en España en una finca de Siero ya se ha extendido por Asturias, donde ha encontrado un clima propicio para su reproducción y desarrollo. Pero los expertos temen que esta especie invasora se pueda extender rápidamente a Galicia y el País Vasco. De hecho, la plataforma Mosquito Alert ya ha lanzado una alerta a sus colaboradores en ambas comunidades para que se mantengan vigilantes. Es una forma, aseguran, de poder acotar el rango de distribución real.

Jorge Chachero, responsable de una empresa audiovisual de divulgación científica, fue quien halló en su casa de la parroquia asturiana de Anes unos mosquitos que le llamaron la atención, porque picaban y volaban de día y tenían manchas, como pintas blancas, en las patas. Así que envió unas fotografías a la plataforma Mosquito Alert para que identificaran la especie. Nada más ver las imágenes, le pidieron que capturase uno y los enviase. Chachero lo hizo. Les remitió un ejemplar adulto y no solo eso, sino que encontró las larvas, en un bebedero que tiene en su finca, un área arbolada y con pastos.

Los expertos que se desplazaron hasta el lugar confirmaron no solamente la presencia del Aedes japonicus, sino que había muestras de su presencia a 10 kilómetros de donde había sido hallado el primer ejemplar. Ya entonces pensaron que podía haber llegado a Oviedo. Ahora están prácticamente seguros.

La alerta lanzada por Mosquito Alert y el Ministerio de Sanidad ha hecho que numerosos ciudadanos se hayan descargado su aplicación gratuita en el móvil y hayan enviado fotografías de mosquitos con su ubicación.

Propagación

"Muchos no son de esa especie, pero otros sí, y hemos comprobado que algunos ya están a 15 kilómetros del lugar del hallazgo", confirmó ayer el biólogo catalán y director de Mosquito Alert, Frederic Bartumeus. "Nuestra sensación es que ya debe de llevar varios años asentado hasta que se encontró el primer ejemplar", añadió. "El norte de España tiene un clima y unas condiciones muy propicias para el asentamiento, reproducción y expansión de este especie invasora, por lo que es fácil que colonice otras zonas", señala.

¿Y cómo puede ser que pasara desapercibido hasta ahora? La respuesta de este experto es que "no es tan agresivo como el mosquito tigre, y hasta ahora probablemente no haya picado a muchos humanos, sino a ganado".

El mosquito Aedes japonicus, como especie invasora que es, se va adaptando genéticamente a los cambios para así poder sobrevivir. "Lo más natural es que colonice la zona norte del país, porque tiene bosques, muchos espacios rurales, una temperatura adecuada y humedad", explica Bartumeus.

De ahí que Mosquito Alert haya lanzado en su aplicación una alerta a sus colaboradores en Galicia y País Vasco. "No es previsible que esta especie, por sus características, se extienda por el interior de la península ni el área mediterránea, donde hace demasiado calor para que puedan sobrevivir", detalla Bartumeus.

El objetivo de los expertos es averiguar el área de extensión de este mosquito. "Es una especie muy difícil de erradicar. Si ya no llegamos a tiempo, al menos tenemos que adoptar medidas para minimizar su impacto controlando su población", aclara el director de Mosquito Alert.