Tres incendios declarados en los últimos diez días en Vilariño de Conso, en el parque de O Invernadoiro, redujeron a cenizas más de 110 hectáreas. La localidad ourensana y otros 73 ayuntamientos gallegos llevan años marcados en rojo en el mapa forestal del Gobierno central ya que están entre los 100 municipios españoles que más fuegos registran en su territorio -14 de la provincia de A Coruña, seis de Lugo, 29 de Ourense y 25 de Pontevedra-. El balance de los grandes fuegos de 2017 vuelve a situar a la comunidad gallega como la más castigada por las llamas: concentra el 41% de los incendios de toda España que devoraron más de 500 hectáreas y el 21% de los que pusieron en jaque a la población.

La ola de incendios del pasado mes de octubre en Galicia dejó cuatro víctimas mortales y casi 50.000 hectáreas calcinadas -una superficie que equivale a 13 ciudades de la extensión de A Coruña o cuatro del tamaño de Vigo-, obligó a desalojar a más de 2.500 vecinos y causó daños o destruyó por completo más de 30 viviendas. En el conjunto del país, Galicia es la comunidad con más incendios que ponen en jaque a la población y a los bienes no forestales. De los 99 fuegos que en 2017 cercaron viviendas y amenazaron a los vecinos por toda la geografía española, 21 ocurrieron en municipios gallegos. Le siguen en el ranking de comunidades con más incendios que pusieron en riesgo a la población Andalucía (19) y Castilla y León (18). Y con un volumen por debajo de estas cifras, se mantienen en la parte alta de la tabla Cataluña (9), Comunidad Valenciana (8), Castilla-La Mancha (7) y Baleares (6).

La Rioja, País Vasco y las ciudades de Ceuta y Melilla fueron los únicos territorios que el año pasado no registraron incendio alguno con consecuencias sobre personas o bienes no forestales.

En el conjunto del país, las evacuaciones preventivas de población, bien por cercanía del frente de llama o por presencia de humo fueron necesarias en 54 incendios, lo que supone un aumento respecto al año anterior. En Galicia se contabilizaron cinco. A la cabeza, Andalucía (17), Castilla y León (8) y Comunidad Valenciana y Baleares (con 6 en cada caso).

La segunda de las consecuencias más habituales fue la interrupción del tráfico en la red de carretera; que fue comunicada en 47 fuegos, que en seis ocasiones afectó a la Red de Carreteras del Estado.

En cuanto al número de heridos, así como el alcance y la gravedad, es difícil de establecerlo con precisión, según recoge el informe estadístico del Ministerio del Interior, ya que se consideran como tales aquellos que son atendidos por el dispositivo desplazado y que no requieren atención hospitalaria, como aquellos otros que sí la necesitan y son evacuados a los centros médicos. No obstante, según informaciones procedentes de las delegaciones de Gobierno, se tiene constancia de 40 heridos en España de diversa consideración en 14 incendios, sin destacar ninguno de ellos por el número excepcional de heridos.

Más de 500 hectáreas

Durante 2017 ardieron en España cerca de 179.000 hectáreas, más de 61.000 en los montes gallegos, lo que representa el 35% de la superficie arrasada en el conjunto del país. En cuanto al número de grandes incendios (aquellos que superan las 500 hectáreas), 2017 es el año con más grandes fuego de la última década, según recoge el anuario estadístico que acaba de publicar el Ministerio del Interior. En total, 56 incendios por encima de esa superficie calcinada, casi un 190% más que los contabilizados el ejercicio anterior, de los que 23 se produjeron en la comunidad gallega -11 en la provincia de Ourense, 9 en la de Pontevedra y 3 en la de Lugo-.

Seis de ellos ocurrieron fuera de la época de máximo riesgos estival (del 15 de junio al 31 de octubre), según destaca Interior, y la mayoría de ellos se produjeron de manera simultánea. Los periodos de mayor concentración de fuegos fueron del 19 al 20 de abril; del 24 de junio al 3 de julio; del 27 de julio al 7 de agosto; del 24 al 26 de agosto; del 8 al 9 de septiembre y, finalmente, el más largo de todos y que en Galicia devoró casi 50.000 hectáreas: del 9 del 16 de octubre.

De los 56 grandes incendios forestales, el de mayor dimensiones ocurrió en la localidad leonesa de Encinedo en agosto (más de 9.800 hectáreas). Las llamas que el 15 de octubre asolaron Ponteareas (Pontevedra) dejaron la segunda mayor superficie arrasada por un fuego el año pasado: casi 8.900 hectáreas. En la lista también destacan los incendios en los municipios ourensanos de Melón, con casi 6.000 hectáreas calcinadas; y Lobios, con más de 3.400. En As Neves, un fuego devoró más e 2.800 hectáreas, y en A Gudiña, 1.809. Todos en la oleada del mes de octubre.