El incendio forestal iniciado durante la madrugada de ayer la localidad ourensana de Chandrexa de Queixa, quedó estabilizado ayer tras afectar a una superficie próxima a las 20 hectáreas. Pero a última hora de la tarde todavía continuaban activas las llamas en el concello lucense de Quiroga, que redujeron a cenizas más de 100 hectáreas.

Este último fuego prendió en una zona montañosa de difícil acceso de la parroquia de Outeiro, en los límites de Quiroga con la sierra de O Courel, por lo que se trata de una zona de gran valor paisajístico y medioambiental.

Con evolución favorable y "próximo a ser estabilizado", se encontraba a última hora de la tarde de ayer el incendio en Quiroga, que comenzó a las 17.31 horas del domingo y que, según las primeras hipótesis, pudo ser provocado por un rayo, según apuntan desde la Consellería do Medio Rural.

En el operativo en las proximidades de O Courel participan 37 brigadas, 8 agentes forestales, 14 motobombas, 11 helicópteros y tres aviones, entre otros medios de extinción. El concejal de Atención al Ciudadano de Quiroga, José Enríquez, precisó que el fuego se extendió por una zona de difícil acceso, en un "terreno escarpado", lo que dificulta las labores de extinción. También confirmó que no hay ninguna población cerca que pueda resultar afectada.

Por otra parte, Medio Rural recuerda que los terrenos afectados por incendios forestales no computan para el cobro de la Política Agrícola Comunitaria (PAC), de la que se benefician en Galicia cerca de 33.000 personas. El departamento que dirige Ángeles Vázquez informó de que se están reforzando y perfeccionando los controles de las superficies declaradas para el cobro de los pagos de la PAC.