El gerente del área de seguridad en la circulación del noroeste de Adif, Fernando Rebón Sartal acudió ayer alos juzgados de Santiago para declarar ante el juez Andrés Lago Louro, que instruye la investigación por el accidente del Alvia en Angrois el 24 de julio de 2013.

El juez instructor incluyó a Rebón como investigado en la causa a comienzos del mes de febrero, para, en palabras de Lago Louro, "esclarecer algunos de los defectos que, en lo que se refiere a la gestión de la seguridad y riesgos inherentes a la línea, justificaron en su día la imputación del señor Cortabitarte".

En este sentido, el juez no ve "descartable" que "buena parte de los reproches que justificaron la imputación" de Cortabitarte "puedan ser extensivos" a Rebón.

El cargo de Adif defendió ante el magistrado, que no tenía competencias en la puesta en servicio de la línea. Así lo ha apuntado en declaraciones a los medios Manuel Alonso Ferrezuelo, letrado de la plataforma de víctimas del tren que descarriló el 24 de julio de 2013 en Santiago --con 80 muertos y más de 140 heridos--, quien ha explicado que la declaración de Rebón ha sido "bastante breve", en donde ha afirmado que "no tenía competencias en lo tocante a la puesta en servicio de la línea".

Así, Rebón solo ha contestado a preguntas del fiscal, juez y su abogado, por lo que el letrado de las víctimas ha lamentado no poder haber preguntado por "un tema vital", como es la desconexión del sistema de seguridad a bordo, ya que "él sí ha reconocido que su labor sí era en cuanto a la seguridad una vez que estaba en marcha la vía".

Al respecto, Alonso señala que el reconocimiento de sus labores incluye la supervisión de la desconexión, y esta "no se hizo como está ya acreditado por todos los peritos". De este modo, apunta que "es verdad que en la documentación de puesta de funcionamiento de la línea no hay ninguna firma niningún documento" referido a Rebón. "A partir de ahí sí que podemos entender que quizás no la tenga (responsabilidad), ya veremos a ver y analizaremos toda la documentación", ha agregado.

"Pero sí que entendemos que en cuanto a la desconexión sí tiene una responsabilidad porque él es el gerente de seguridad de esta zona de España; entendemos que se tenía que haber supervisado y analizado ese riesgo, tal y como ha dicho la ERA (Agencia Ferroviaria Europea) y distintos peritos, y no ha se ha hecho", asegurado. "Entiendo que sí que tiene responsabilidad en cuanto a este hecho, que fue vital a la hora del accidente", ha dejado claro el abogado de las víctimas sobre la supervisión de la seguridad.

Poco antes de las 9,00 horas también entraban en los juzgados tanto el juez como uno de los técnicos de la unión temporal de empresas (UTE) de Thales y Dimetronic (citado también este miércoles para las 10,00 horas), la que suministró la tecnología de seguridad de la línea Ourense-Santiago, donde se produjo el siniestro que ocasionó 80 muertos y más de un centenar de heridos.

Esta nueva jornada de declaraciones se produce una semana después de que el director de Seguridad en la Circulación de Renfe, Antonio Lanchares, investigado, dimitiese de su cargo. La dimisión del directivo se produjo una vez que el ministro de Fomento, José Luis Ábalos, se comprometió con las asociaciones de víctimas del accidente a estudiar fórmulas para que las comisiones de investigación sean independientes funcional y económicamente del Ministerio.

La reunión en concreto acerca de esta viabilidad se celebró la semana pasada con la Asociación de Perjudicados del Accidente Ferroviario del Alvia (Apafas) y la Plataforma de Víctimas del Alvia 04155. El abogado de la plataforma de víctimas Alvia 04155, Manuel Alonso Ferrezuelo,Ferrezuelo ha manifestado hoy a los medios de comunicación, sobre Lanchares, que "más que una dimisión, le hicieron dimitir" y ha expresado su desconocimiento acerca de si se hará lo mismo con otros investigados de Adif.

"Entiendo que debe ser así, tienen la misma responsabilidad", ha puntualizado y ha agregado que en esta jornada, donde no pudieron preguntar las partes personadas, también ha declarado un técnico de la Unión Temporal de Empresas (UTE) Thales y Dimetronic, por la gestión de la seguridad y el riesgo, que ha alegado que en su encargo figuraba el examen hasta unos metros antes de la curva de Angrois, en la que se registró el choque del tren.

"Era hasta el kilómetro 84", ha contado Ferrezuelo que explicó, y el ERTMS en cuestión, que hubiese generado el frenado automático, "no llegaba hasta el final de la línea, solo hasta antes de la curva" y es "uno de los elementos vitales, de los motivos por los que se produjo" el trágico percance, porque "no había sistema", ha detallado el abogado de las víctimas.

Mañana y pasado el juez proseguirá con las comparecencias y será el turno de los peritajes, este jueves los aportados por la defensa del maquinista, Francisco José Garzón Amo, centrados en las carencias y en el hecho de tratar un error humano de otro modo, y el viernes de los profesionales que ha designado el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), que entienden que en todo momento se respetó lo que la normativa establece.