El juicio a un miembro de Protección Civil para el que piden 15 años de cárcel acusado de provocar un incendio de varios focos en Ribeira que calcinó en el año 2013 cerca de 200 hectáreas y que se debía celebrar desde ayer en Santiago en la Sección Sexta de la Audiencia Provincial de A Coruña quedó suspendido hasta el próximo año por la ausencia de un testigo de la defensa.

En concreto, el juicio quedó aplazado a marzo de 2019, ante la imposibilidad de que un testigo, que se encuentra en Estados Unidos, haya podido declarar. El juez explicó que dado que este testigo, que "parece que puede ser importante", no va a volver a España, debe prepararse el procedimiento para que declare por videoconferencia, según informa Europa Press.

Tras la suspensión de la vista, Francisco Lago, el abogado del acusado, defendió que este es un testigo "esencial", ya que "lo sitúa a la hora del incendio en otro lugar". Además, esta persona, señaló, "fue testigo de la llamada que le hizo Protección Civil" ese día al ahora acusado "para que acudiese a colaborar en la extinción del incendio". Lago aseguró también que ve las pruebas contra su cliente "un tanto endebles" y considera que tanto la prueba que se practicó, como la actuación de la policía, "fue un tanto irregular".

Por este caso, el acusado estuvo casi un año en prisión preventiva, entre 2014 y 2015. El Ministerio Fiscal pide 15 años de prisión para este hombre por un incendio ocurrido el 27 de agosto de 2013, que puso en riesgo un polígono y un hospital y llevó a cortar la autovía de O Barbanza.