En Marea, PSdeG y BNG coincidieron ayer en el diagnóstico sobre la remodelación del Gobierno gallego acometida por Alberto Núñez Feijóo. Las tres formaciones criticaron que no se aprovechasen los cambios para destituir al conselleiro de Sanidade, Jesús Vázquez Almuíña, tras la muerte de una persona por no recibir atención médica en un centró médico este verano en A Estrada. Y también criticaron que el Partido Popular realice un uso partidista de las consellerías para promocionar a sus candidatos a las elecciones municipales del próximo año. Por todo ello, consideraron que el anuncio no es más que "chapa y pintura" y se reduce a un "cambio de cromos".

El portavoz de En Marea, Luís Villares, lamentó que el presidente gallego no haya aprovechado esta modificación en su Ejecutivo para cesar al responsable de Sanidade. "Para nosotros lo más grave es lo que no se hizo", dijo al respecto, y explicó que el jefe del Ejecutivo mantiene a Almuíña para protegerse a sí mismo de las responsabilidades que se depuren en la comisión de investigación sobre los recortes en Sanidade que se inicia hoy en el Parlamento.

Villares cargó también contra la esperada remodelación del Gobierno gallego para dar salida a Beatriz Mato (Medio Ambiente) y José Manuel Rey (Política Social), que serán candidatos del PP a las Alcaldías de A Coruña y Ferrol en mayo del próximo año, al entender que "certifica" el uso "partidario" que han hecho de las administraciones autonómicas.

Por su parte, el secretario xeral del PSdeG, Gonzalo Caballero, coincidió con esta visión partidista de las consellerías que proclama Villares y calificó de "cambio de cromos" la remodelación. Caballero censuró que Feijóo "cambia de conselleiros en función de intereses que cree que le pueden funcionar al PP", para que se presenten a las elecciones Beatriz Mato y José Manuel Rey Varela.

"Pero el cambio de cromos no arregla los problemas de la Galicia real, no cambia las políticas públicas de la Xunta ni rectifica sus errores y el PP sigue sin tener equipo para desarrollar un proyecto de interés para la mayoría de la ciudadanía", afirmó el dirigente socialista.

A su juicio, el presidente de la Xunta y del PP gallego sabe que su partido "corre el riesgo de no gobernar en ninguna de las siete ciudades gallegas" a partir de mayo de 2019 y "cambia los conselleiros de la Xunta en función del interés del PP" para intentar "salvarle los muebles".

Por último, la líder del BNG, Ana Pontón, advirtió de que la remodelación del Gobierno gallego no soluciona los problemas de Galicia, que no se ven atendidos con la "chapa y pintura" que suponen los nuevos nombramientos.

La portavoz nacional del BNG opinó que la sustitución de conselleiros "no es un cambio de gobierno sino un recambio" que demuestra que la Xunta es una "prolongación del gabinete electoral del PP" que es quien marca los tiempos.

E incidió en que la salida de Beatriz Mato y José Manuel Rey debería haberse producido antes porque llevan "meses" centrados en sus aspiraciones electorales.

A su juicio, Feijóo debería haber cesado al conselleiro de Sanidad, Jesús Vázquez Almuíña, y al titular de Empleo, Francisco Conde.